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Sexto doblete de Sergio García, ¿el resurgimiento?

Sergio García de la Fuente, nacido en Barcelona el 9 de junio de 1983, ha asumido el liderazgo en el Real Betis de la campaña 2009-10. Su papel será fundamental en un año en el que el conjunto de Antonio Tapia caminará por el infierno de Segunda. La pretemporada, pese a la debilidad de Sanluqueño, de Tercera División, y Roteña, de Primera Andaluza, ha concedido el rol protagonista al ariete.

el 16 sep 2009 / 06:16 h.

Sergio García de la Fuente, nacido en Barcelona el 9 de junio de 1983, ha asumido el liderazgo en el Real Betis de la campaña 2009-10. Su papel será fundamental en un año en el que el conjunto de Antonio Tapia caminará por el infierno de Segunda. La pretemporada, pese a la debilidad de Sanluqueño, de Tercera División, y Roteña, de Primera Andaluza, ha concedido el rol protagonista a un ariete que en la noche del pasado sábado anotó su tercer doblete con la casaca del once heliopolitano y el sexto de su carrera.

Desde que el otrora canterano del FC Barcelona debutase en Primera División un 3 de septiembre de 2003, a las órdenes de Frank Rijkaard y en un Barça-Sevilla (1-1), el catalán ha celebrado seis dobletes, tres en encuentros de Liga y otros tantos en amistosos. De los seis que firmó, la mitad, -3-, fueron conseguidos con la elástica del cuadro heliopolitano.

El primer choque en el que logró dos dianas con el Betis fue el 16 de noviembre de 2008, día en el que el plantel entonces dirigido por Paco Chaparro doblegó al Racing (3-1). Emana se unió a la nómina realizadora en el Ruiz de Lopera.

Dos meses más tarde, concretamente el 18 de enero de 2009, repitió el ritual en el José Zorrilla ante el Real Valladolid (1-3). Xisco completó el festival ofensivo de un escuadrón que por entonces caminaba por la zona peligrosa de Primera División. Y el envite ante la Roteña ha significado su tercer doblete con la casaca verdiblanca. El ex del Levante, que figuró en la zona de ataque junto a Pavone, se ha erigido en la referencia ofensiva de Antonio Tapia.

Sergio García, sin embargo, no responde al perfil de un '9' nato de área. Sus números en la Liga anterior, pese al dramático descenso a Segunda, fueron los más brillantes de su carrera en Primera, ya que anotó 9 goles -dos más que el récord que firmó en el Levante en la 2004-05, 7-. Sus cifras más elevadas datan de la 02-03, campaña en la que, a las órdenes de Quique Costas, materializó 19 dianas en el Barcelona B.

Precisamente, en la cantera del Barça fue una de las perlas del siglo XXI. 969 tantos avalaron su promoción al filial de la entidad azulgrana, en la que es, gracias a sus números, el máximo goleador de su historia en las categorías base -Bojan Krkic es el segundo con 849 dianas-.

Su irrupción en el panorama profesional secó su progresión, ya que en su primera experiencia en el primer conjunto catalán apenas contabilizó cuatro choques, su pasaporte hacia el Levante. En Valencia logró sus números más brillantes hasta entonces -7 tantos-, aunque en el verano de 2005 se enroló en el Real Zaragoza.

Y fue allí donde consiguió el primer doblete de su carrera tras firmar su primer contrato profesional. El 20 de julio de 2005, el de Barcelona consiguió dos dianas en un bolo que el once de Víctor Fernández celebró ante el modesto Boltaña, de la Segunda Regional oscense.

Un año después, el 18 de julio de 2006, Sergio García firmó la cifra goleadora más destacada de su carrera. Fue en otro amistoso, aunque ante idéntico rival, el Boltaña. El arquero boltañés encajó siete dianas del ariete zaragocista, pichichi de aquel verano de 2006. Apenas quince días más tarde se alzó con el segundo doblete de su palmarés ante el Heracles holandés en otro compromiso estival.

Un año se demoró el catalán en cumplir con la cita, ya que la tercera ocasión en la que fue capaz de marcar dos tantos en un mismo choque fue el 29 de julio de 2007, cuando, en el Real Zaragoza de Víctor Fernández, fue el máximo goleador de un nuevo amistoso ante el Huesca, entonces en Segunda B (1-4). Y la primera fecha en la que logró batir la meta rival de forma doble en un choque oficial fue el 3 de febrero de 2007, día en el que el once aragonés se imponía (1-2) al Espanyol en Liga.

Ahora, y después del trámite ante la Roteña, Sergio García asume su nuevo papel, el de líder de un ataque en el que, si Estudiantes no plantea una oferta irrechazable por Pavone, deberá ser el referente. Su reconciliación con el gol, pese a la debilidad del último adversario veraniego en Rota, es un dato significativo para un conjunto que el próximo 30 de agosto deberá asumir la cruda realidad de una categoría, la Segunda División, en la que debutará ante el Córdoba de Lucas Alcaraz.

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