Hablar de violencia ya no sorprende a nadie en México, pero lo que ya no es tan habitual que sicarios del crimen organizado maten a 20 personas en tres ciudades en un solo día. La mayoría de los asesinatos tuvieron lugar en las dos ciudades más violentas del país, Ciudad Juárez y Tijuana.
Los atentados se produjeron el viernes, justo el día en el que las principales autoridades mexicanas se reunieron para refrendar su compromiso de combatir la delincuencia.
La acción más violenta ocurrió en Ciudad Juárez, fronteriza con Estados Unidos, donde por la noche un grupo de individuos armados entró en un restaurante-marisquería y asesinó a ocho hombres, dijeron a Efe fuentes oficiales. De acuerdo a la información recabada en el lugar, los agresores penetraron encapuchados al restaurante, situado en una avenida principal y cercano a uno de los cruces internacionales a Estados Unidos.
Los sicarios, según testigos, localizaron al grupo de personas en el interior del establecimiento, los tiraron al suelo y los acribillaron con más de un centenar de disparos de armas de gran calibre.
Ciudad Juárez es la ciudad mexicana más violenta con más de 1.000 asesinatos atribuidos al crimen organizado de los cerca de 5.000 registrados en todo el país en lo que va de este año.
Este mismo viernes otras cinco personas fueron asesinadas en Ciudad Juárez, en hechos atribuidos al crimen organizado. Además, fue encontrado el cuerpo sin vida de una adolescente con síntomas de haber sido torturada. Esta urbe ha llamado la atención internacional porque desde 1993 se han registrado más de 400 asesinatos de mujeres, la mayoría de ellos no resueltos.
Mientras tanto, seis personas, entre ellas un agente municipal, fueron asesinados en las ciudades fronterizas de Tijuana y Ensenada, en el estado mexicano de Baja California, noroeste del país.
Entre las víctimas se encuentra el policía municipal Alan Bernal Estrada, quien en el momento de ser asesinado no estaba de servicio en el área comercial donde estaba destinado, indicaron las mismas fuentes.
Bernal Estrada fue acribillado a balazos por varios individuos armados cerca de la zona residencial conocida como El Murúa, en el este de Tijuana, un área que se encuentra bajo vigilancia de las fuerzas federales y militares desde el pasado 18 de noviembre.
Analistas consideran que el estado de Chihuahua, al que pertenece Ciudad Juárez, es un territorio en disputa de los cárteles de la droga por su estratégica vecindad con Estados Unidos hacia donde envían la droga y desde donde trafican con armas.
En tanto, Tijuana, también fronteriza con EEUU, es escenario de la violencia entre miembros del cártel de los hermanos Arellano Félix que se pelean el liderazgo de este grupo mafioso, después de que los principales capos han sido detenidos o muerto.
Esta jornada violenta ocurrió el mismo día en que el Ejecutivo de México, los gobernadores de los 32 estados del país y miembros de los poderes judicial y legislativo presentaron los últimos avances en seguridad, en medio de la indignación popular por la ola de violencia.
Los resultados fueron presentados en la capital del país durante la XXV Reunión del Consejo Nacional de Seguridad Pública. El encuentro marcaba uno de los plazos estipulados por las autoridades para ejecutar una serie de compromisos acordados hace 100 días en una cumbre previa.
