La FIT, ese flamante cartel empresarial presentado el pasado mes de enero bajo el rimbombante nombre de Fusión Internacional por la Tauromaquia podría haber muerto antes de nacer. La salida inesperada del empresario francés Simón Casas abre una brecha de consecuencias desconocidas y rompe la principal fortaleza del grupo que sumaba varias decenas de plazas entre México, España y Francia y una importante baraja de matadores, con Morante de la Puebla a la cabeza. El propio grupo ha salido hoy a la palestra emitiendo un breve comunicado en el que justifican la espantada del gestor galo: "La Fusión Internacional por la Tauromaquia (FIT) comunica que, por motivos personales, Simón Casas se desvincula de este proyecto para seguir su carrera en solitario. Emtsa -la empresa de Bailleres-, a pesar del compromiso pactado y firmado, da el acuerdo por finalizado". En el mismo documento se precisa que "La FIT, siguiendo las mismas bases de apoyo y fortalecimiento de la Tauromaquia continuará con la fusión ya existente entre la Emtsa y José Cutiño y el proyecto iniciado en el mes de enero". El nacimiento del grupo se vio rodeado de nuevos rumores de boicot a la empresa Pagés, gestora de la plaza de la Maestranza, que Emtsa se apresuró a desmentir a través de otro comunicado después de confirmarse la ausencia de Morante de la Puebla que sucedía, en orden inverso, a las incomparecencias confirmadas de Alejandro Talavante, El Juli y Miguel Ángel Perera. Con esta ruptura se abren otros interrogantes:? Qué papel ha jugado la presencia de Casas en el organigrama empresarial de la plaza de Las ventas?? Qué ocurrirá en aquellas plazas que, como Zaragoza o Málaga, comparte con Cutiño? Y finalmente,? Qué ha ocurrido con el saneamiento económicode las fuerzas de Casas que había justificado la alianza con los mexicanos? Son preguntas que se irán contestando a la vez que avance una temporada que se ha iniciado con el clima enrarecido prestado por el conflicto sevillano, que permanece en tierra de nadie y pendiente de resolución.
