Con prisas y sin pausas. El Gobierno municipal de PSOE e IU tiene hasta el próximo 28 de marzo para hacer inauguraciones, campañas publicitarias u otro tipo de propaganda, según las nuevas reglas del juego marcadas a nivel nacional por socialistas y populares ante las inminentes elecciones del 22 de mayo. Así que bastantes obras se están acelerando y otras muchas se estrenarán sin boato, postín o pompa, ya que las inauguraciones oficiales tendrán que esperar hasta después de la cita con las urnas.
Pese a ser uno de los proyectos estrella de los socialistas, la ampliación de Fibes no podrá inaugurarse con la fastuosidad y la repercusión mediática que los actuales responsables municipales quisieran porque, aunque se prevé que las obras acaben este mes de marzo, el periodo de puesta a punto del nuevo auditorio diseñado por el arquitecto sevillano Guillermo Vázquez Consuegra requiere unos meses más. Se prevé que el primer evento (musical o congreso) se celebre en junio si no hay problemas durante la fase de pruebas.
La obra (que está llevando a cabo la UTE Acciona-Inabensa-Heliopol) debió acabar a principios de 2010, ya que arrancó el 14 de enero de 2008 con un plazo de ejecución de 24 meses. Por tanto, ya acumula un año de retraso. La causa, según el Ayuntamiento, es la introducción de cambios en el proyecto, mejoras de seguridad y modificaciones para darle una mayor versatilidad al escenario a fin de dotarlo de mayor versatilidad.
Todos estos cambios, además, han inflado el coste final de la obra. De los 69 millones de euros iniciales se pasó a 79 millones más otros 11 de IVA. Eso sí, con esta ampliación del Palacio de Congresos se atiende una reivindicación del sector turístico de hace una década.
De hecho, el diseño de Vázquez Consuegra se eligió hace ocho años, pero la obra no arrancó hasta que el Consistorio se la encomendó a Emvisesa, dado que la iniciativa privada se desmarcó al considerar que el proyecto no era rentable.
Los dos pasos soterrados que se están construyendo en la ciudad, que están poniendo patas arriba el tráfico en el entorno de Cardenal Bueno Monreal y la Avenida de Andalucía y la Ronda del Tamarguillo, tampoco se estrenarán antes del 28 de marzo por mucho que avancen los trabajos.
En el caso del túnel en La Palmera, la Delegación de Movilidad prevé que las obras acaben en mayo y que antes de la Feria estén en servicio el máximo posible de vías ahora en obras. Pero no hay nada claro. El paso soterrado del Tamarguillo, por su parte, está más retrasado y no se prevé su apertura hasta, al menos, el verano. De hecho, el Ayuntamiento ha pedido ya dos prórrogas (que acaban en verano) a la Junta, que es quien costea los proyectos con fondos del Plan Proteja. Ambos han requerido presupuesto extra del Consistorio.
Otro proyecto que no se inaugurará probablemente antes del 28 de marzo es la nueva sede de las delegaciones de Convivencia y Seguridad y Movilidad en la antigua cárcel de la Ranilla. Todo marchaba bien para haberlo estrenado el pasado mes de noviembre, pero discrepancias entre ambas áreas municipales paralizaron el proyecto, que ya está en su fase final. Eso sí, pasó de 17,4 a 20,7 millones fundamentalmente por la redistribución de las instalaciones. El arquitecto se vio obligado a rediseñar el interior y habilitar dos salas de control, en vez de una común para Tráfico y Seguridad.
Además, el parque que está justo al lado empezó a construirse el pasado agosto, en casi 30.000 metros donde se levantaba la antigua cárcel que en la posguerra acogió a miles de represaliados políticos y que desde la década de los 90 había caído en desuso, así que las obras no van a estar antes del 28 de marzo.
Tampoco estará terminada la reurbanización de los jardines del Cristina y el entorno de San Telmo, ni la adecuación turística del Muelle de Nueva York.
El nuevo parque de San Jerónimo, con su pasarela que une este espacio con el Alamillo, está casi acabado, pero la Confederación Hidrográfica del Guadalquivir no concreta si se abrirá antes del 28 de marzo porque faltan detalles y las lluvias no ayudan. Lo cierto es que San Jerónimo ya no vivirá de espaldas al río gracias a un proyecto que costó 8,6 millones y que, además de la nueva pasarela, amplía el parque un 30% y puso fin al muro de José Galán Merino.
Otro proyecto que no empezó siquiera, aunque estaba previsto para el pasado año, es el de la pasarela en la calle Betis. Según Urbanismo, problemas en los cálculos de la estructura obligaron a rediseñar el proyecto.
En cambio, el Gobierno local sí tiene previsto inaugurar antes del 28 de marzo la ampliación del tranvía hasta Viapol, así como la nueva glorieta en el Prado y la estatua en memoria de Aníbal González en la Plaza de España. No obstante, no hay fechas. Además, para los próximos días está prevista la apertura de la biblioteca Felipe González, en el Paseo Juan Carlos I.
