El central bético Antonio Amaya.
La determinante jugada del penalti y la expulsión del pasado sábado en Mestalla aún tiene consecuencias negativas para la entidad verdiblanca. A la derrota del equipo verdiblanco, que se quedó con 10 en el minuto 15, se une la lesión sufrida por el central bético Antonio Amaya en la jugada en la que supuestamente hizo falta a Soldado aunque, como bien demuestran las imágenes, fue el delantero el que dio una patada por detrás al defensa en su tobillo izquierdo.
Según comentó el doctor Tomás Calero, Amaya sufre un esguince de tobillo producido por la contusión que se originó en la jugada donde fue expulsado el central bético. El madrileño está siendo tratado por los servicios médicos del club aunque, salvo complicación, su participación para el próximo partido no corre peligro debido al parón liguero por el que el Betis no jugará hasta el próximo 1 de abril, lunes (22.00 horas), en casa ante el Getafe.
El presidente bético apuntaba ayer que la tarjeta roja mostrada a Amaya por "derribar a un adversario impidiendo una manifiesta ocasión de gol", según el acta arbitral de Muñiz Fernández, va a ser recurrida por el club heliopolitano, al considerarla a todas luces injusta.
El equipo volvía en la tarde de ayer a los entrenamientos en la ciudad deportiva, en una sesión en la que no estuvo presente el técnico, Pepe Mel, que viajó por la mañana a Madrid para reunirse, junto a un buen número de entrenadores -entre los que no estaban los del Real Madrid y el FC Barcelona-, con el presidente de los árbitros.
El que sí volvía a entrenar con el grupo era el francés Damien Perquis, tras el accidente doméstico sufrido en su mano y la posterior intervención quirúrgica que le ha tenido 10 días en el dique seco. Por contra estuvieron ausentes Joel Campbell y Salva Sevilla, que no se va a tener prisas por incorporarlo, según el médico, y Vadillo que está con la selección sub 19.
