La Junta de Andalucía presenta hoy en la capital malagueña su última apuesta por la sociedad del conocimiento: el proyecto Andalucía Compromiso Digital. La iniciativa tratará de acercar las nuevas tecnologías a personas mayores o con riesgo de exclusión digital.
Entablar una bonita amistad con alguien que está a kilómetros de aquí. Comunicarse por email. Leer la actualidad informativa de la prensa sin salir de casa. Realizar cursos de formación a distancia. Reservar entradas de cine. Comprar una prenda de diseño exclusivo de un catálogo. Encontrar trabajo colgando un curriculum en la red e incluso saber si eres el candidato seleccionado mediante una entrevista on line.
Hoy día, qué no puede hacerse por internet.
Pese a los problemas que puede entrañar la dimensión del todo vale y la amenaza que a veces supone en la educación, sobre todo, de los menores, si hay algo que no se le puede reprochar al producto innovador por excelencia -internet- es precisamente su amplitud de miras y la diversidad de servicios que ofrece. En este sentido, quizás habría que derivar la cuestión y preguntarse no qué puede hacerse a través de la red, sino quién puede hacerlo y si se conocen realmente las múltiples posibilidades que se ofertan.
Y es que, aunque la sociedad del conocimiento y las tecnologías tienen cada vez menos lagunas, la todavía existente brecha digital sigue marcando diferencias en algunas zonas de la región andaluza. Ni todos tienen tan a mano los aparatos y recursos digitales, ni los que los tienen saben aprovecharlos de la misma manera. En este terreno sí que quedan muchas cosas por hacer y, para saltar la barrera, la Junta ha ideado el proyecto Andalucía Compromiso Digital, un nuevo sistema que tiene como objetivo acercar las nuevas tecnologías a la sociedad andaluza y mostrar a todos cómo éstas pueden servirles en la vida diaria, en su trabajo, en el tiempo de ocio y para su desarrollo personal.
Las nuevas tecnologías ofrecen un amplio abanico de servicios y beneficios que, a menudo, los ciudadanos desconocen: desde internet y los ordenadores hasta los móviles, pasando por las cámaras digitales, la televisión digital terrestre (TDT) y una larga lista de aparatos de última generación.
Muchas veces la edad, la posición social y el lugar de residencia son un freno para algunos colectivos que ven las tecnologías como algo que no va con ellos y se pierden los beneficios que éstas pueden aportarles. Como se suele decir en estos casos, cuatro manos hacen más que dos y la Consejería de Innovación ha organizado un grupo de voluntariado digital que trabajará codo con codo con los que le rodean ayudándoles a descubrir el mundo tecnológico y sumarse a una nueva sociedad que ha irrumpido de forma impactante y ante la que ya no se puede mirar hacia otro lado.
El proyecto no consiste en programar clases sobre cómo usar el ordenador y los voluntarios no son concebidos como profesores de internet. Más bien son orientadores que tratarán de descubrir y estimular en quienes se apunten las ganas de modificar aspectos de la vida que antes parecían no tener vuelta atrás y que ahora, gracias a las tecnologías, pueden mejorar.
El invento pasará del papel a la práctica el viernes, cuando ya se podrá empezar a solicitar y recibir los primeros acompañamientos digitales, concepto que define el modo en que los voluntarios ponen su ayuda y conocimientos al servicio de los demás.
En Encode. La iniciativa será presentada durante un concierto solidario en el marco de Encode 2007, un espacio de reflexión mundial celebrado en el Palacio de Exposiciones y Congresos de Málaga en el que se abordarán, durante dos días, los escenarios de futuro social, político y económico orientados a la construcción de una sociedad del conocimiento basada en la cooperación, la paz y la sostenibilidad.
