Francisco Lucas, director general de Telefurgo, a bordo de una de las Furgonetas Solidarias. / El Correo «Cuando quieres hacer un acto benéfico no es tan importante el coste que tenga sino que pesa mucho más la satisfacción tan positiva que te queda». Con este mensaje, Francisco Lucas López, director general de Telefurgo, anima a otros empresarios a que potencien proyectos solidarios como el de las Furgonetas Solidarias. Y es que esta franquicia de alquiler de furgonetas y vehículos industriales va a ceder durante los próximos meses un total de 50 furgonetas de forma gratuita para colaborar en causas solidarias en 19 ciudades de España, entre ellas Sevilla. De este modo, cualquier asociación con fines solidarios u ONG que lo desee podrá solicitar el servicio de alguna de estas furgonetas. La idea es proporcionar a cada asociación solicitante uno de estos vehículos durante 24 horas, sin ningún coste y con el depósito lleno de combustible. Según Francisco Lucas, la iniciativa surgió de una simple conversación. «En Telefurgo tenemos como clientes desde hace tiempo al algunas asociaciones benéficas y una de ellas, hace unos meses, nos solicitó expresamente una colaboración para una acción social de un banco de alimentos», aclara. Por aquel entonces, a los socios de Telefurgo les pareció oportuno colaborar con dicho acto solidario y así lo hicieron, y como después de aquella acción «nos sentimos muy bien, porque ayudamos a gente mayor» se plantearon la posibilidad de hacerlo extensible a otras organizaciones de carácter benéfico. Partiendo de aquel gesto solidario empezaron a darle forma al proyecto y de ahí surgió la idea de las Furgonetas Solidarias. «Pensamos en poner medio centenar de furgonetas a disposición de causas sociales, canalizando la iniciativa a través de asociaciones o incluso a través de algún empresario que quisiera participar en el proyecto, pero siempre acompañado de una ONG», subraya el director de Telefurgo. Para ello, canalizaron la iniciativa a través de una página web donde han puesto las bases de participación y a la vez en ella todas las asociaciones que lo deseen pueden solicitar la inscripción. La fecha límite para la emisión de solicitudes es el domingo 14 de septiembre y la entrega de los vehículos se realizará entre el 22 de septiembre y el 31 de octubre. «Hasta el momento tenemos una muy buena acogida por parte de asociaciones de muchas provincias diferentes que se han puesto en contacto con nosotros», destaca. En Andalucía ya han recibido algunas solicitudes, como la de Fundación Rais de Sevilla, que ayuda a personas sin hogar o en riesgo de exclusión social, o para bancos de alimentos, como la Asociación Cultural Estella del Marqués de Jerez de la Frontera. Fuera de Andalucía les han legado peticiones de asociaciones de Asturias, Valencia, Tarragona o Burgos. «Casi todas tienen el mismo perfil y función, que es ayudar a las personas que lo necesitan», recalca. De hecho, montar un comedor social con todo el mobiliario «es muy complejo», porque se necesita la logística del transporte. Por eso, aunque las necesidades de cada ONG son muy variopintas, «muchas se inscriben para poner en funcionamiento especialmente comedores sociales o bancos de alimentos», afirma Francisco Lucas. Poco después de que comenzara el plazo de solicitudes de inscripción, un restaurante de Madrid se puso en contacto ellos porque «querían regalar 150 kilos de alimentos básicos pero no tenía forma alguna de transportarlos», detalla Francisco. «Con este ejemplo nos dimos cuenta de que se pueden poner en pie triangulaciones de colaboración entre otra empresa, una asociación y nosotros para conseguir llevar a cabo un acto social», manifiesta con entusiasmo. En el caso de esta franquicia, el coste de las 50 furgonetas solidarias lo distribuyen entre las 14 empresas que componen el grupo, «así que al distribuir esos costes entre todas ellas no nos supone un gran peso económico», esgrime Francisco, quien además reconoce que son un equipo de 70 personas y «todos y cada uno de nosotros estamos muy contentos y satisfechos de poder llevar a cabo una acción solidaria como ésta». Al final, iniciativas como la de Telefurgo sirven para poner de relieve que, aparte de tener una empresa para generar beneficios, éstas se pueden también usar como trampolín para ayudar a los que más lo necesitan.