Se asombra Antonio Luque, Sr. Chinarro para el mundo de la música, de que desde que empezaron a circular las primeras canciones de su nuevo disco, Presidente, fuera un clamor la idea de que por fin salía de la oscuridad. "Es cierto que mi disco Ronroneando era un poquito triste, era un momento en que empezaba la crisis económica, muchas parejas a mi alrededor rompían....", dice. "Pero en El mundo según ya se habló de un Chinarro más luminoso, y por otro lado, salvo en mis primeros trabajos, nunca he hecho música siniestra. Vale, nunca he sido la alegría de la huerta, siempre he tenido un poco de melancolía, y como artista eso se trasluce".
Lo seguro es que Presidente (Mushroom Pillow), decimoprimer título de su carrera, desarrolla el lado más lúdico y disfrutón del sevillano (al parecer, la primera idea era bautizarlo como Timbres de castillo), empezando por el propio título, en el que ironiza con esa consideración de líder o referente generacional que muchos le adjudican.
"Un poco así me siento cuando me hacen caso en facebook", explica Luque. "Pongo comentarios como ciudadano, cosas que veo en Málaga, que es la ciudad donde vivo ahora, pero se me olvida que hay ahí 3.000 personas leyendo a diario. Un día pusieron la broma, Chinarro Presidente. Y a los de mi discográfica, que también miran el facebook para que no diga ninguna burrada, les gustó. Ahora, con todo lo de Zapatero de los últimos días, creemos que es un título bastante oportuno", agrega.
Once temas componen un repertorio del que se ha extraído como primer sencillo el pegadizo Vacaciones en el mar. Acompañan a Luque en la grabación los miembros del grupo Maga, Pablo Cabra y Javi Vega, mientras que la presencia de Jordi Gil a los mandos en los estudios Sputnik de Sevilla equivale casi a la de un músico más.
El amor y su reverso oscuro, así como el sexo y sus estribaciones, inspiran buena parte de las letras de este nuevo trabajo. Cuando se le pregunta si cabe decir algo en esa materia que no esté dicho ya, se encoge de hombros. "Bueno, del amor se ha dicho todo, pero los mensajes se van actualizando. Es un poco como la moda, basta con que pase algún tiempo, y ya todo vuelve a ser nuevo. Yo saco ideas de muchas lecturas, desde Italo Calvino a Roland Barthes. Pero para un chaval de 20 años que no haya leído a esos autores, va a recibir esas ideas por medio de mis canciones, y éstas serán su referencia. hay que pensar en quien las oye por primera vez", apunta.
Con 20 años ya de carretera, Sr. Chinarro ha logrado consolidar una carrera que empezó a la manera de unos The Cure sevillanos y ha llevado a Luque y los suyos a convertirse en un hito del pop-rock independiente. Después de una larga etapa en el sello Acuarela Discos, la formación dio un considerable salto de calidad con El fuego amigo (2005), y una vez fichados por el sello Mushroom Pillow no han parado de producir éxitos notables, siempre teniendo en cuenta los parámetros en los que se mueven: El mundo según (2006), Ronroneando (2008) y ahora Presidente (2011).
¿Es Luque consciente de haberse convertido en figura de culto, como otros lo fueron para él? Él duda antes de responder: "Desde dentro no se ve, la verdad. Como te he dicho, estoy en Málaga, no me conocen, muy poca gente me para por la calle para pedirme un autógrafo, de manera que no me entra en la cabeza que Sr. Chinarro pueda ser para nadie lo que fueron para mí Santiago Auserón o Iñaki Fernández, de Glutamato Ye-Yé. Sé que en cierto modo es así, porque ahí están los periódicos haciendo entrevistas, saco discos y se venden, y es más divertido tocar en garitos llenos de gente que vacíos", apostilla el artista.