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Esta madrugada ha tenido lugar el habitual cambio horario de verano: los relojes se han adelantado una hora. El Correo ha salido a la calle a preguntar a los sevillanos qué piensan acerca del cambio y cómo adaptan su vida al nuevo horario

el 27 mar 2010 / 18:54 h.

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¿Qué hora es? Ésta es la frase más repetida hoy por todas las personas que se han tenido que adaptar esta madrugada al cambio horario, sobre todo los más despistados que han olvidado cambiar la hora adelantando las agujas del reloj. Suerte que es domingo y muchos no trabajan, porque un descuido así en ocasiones le ha costado caro a más de uno. Lo cuentan los sevillanos, que hablan por sí mismos y confiesan en las páginas de este periódico los descuidos más imperdonables y las anécdotas más divertidas que han vivido por culpa de unas agujas mal colocadas.

 

Esta tarde, a las cinco, no serán las cinco, serán las seis. ¿Sabe el por qué? La calle refleja que en esta materia lo sevillanos aprueban con nota. El cambio se ha producido a las dos de la madrugada, y se mantendrá hasta las tres de la madrugada del domingo 31 de octubre, momento en el que se retrasa el reloj una hora. De esta forma, hoy, Domingo de Ramos, mientras la Borriquita pasea por las calles, estará asistiendo, casi sin darse cuenta, a un fenómeno que marcará el resto de las estaciones hasta el próximo otoño: se habrá alejado una hora más de la hora del meridiano de Greenwich, lo que quiere decir que habrá engañado al tiempo ganándole dos horas más de sol. Casi nada.

El principal objetivo del cambio horario es mejorar el aprovechamiento de la luz solar y su consecuente ahorro de energía, ya que según el Instituto para la Diversificación y Ahorro de la Energía (IDAE), el ahorro doméstico en iluminación desde el cambio de horario de marzo a octubre alcanza el 5%.

Sin embargo, no todo el mundo piensa que el ahorro de energía beneficie directamente. Los encuestados por El Correo saben que el cambio de hora tiene como objetivo este ahorro, pero hay quien no está demasiado convencido de que realmente beneficie al ciudadano: Francisco Gallardo cree que "las que realmente ahorran son las grandes empresas, no nosotros. El beneficio es para ellas".

No obstante, la mayoría de ellos están entusiasmados con la idea de que los días se alarguen, como Manuela de la Rosa, que asegura que "si hay más horas de luz, hay más tiempo de ocio y paso más horas paseando con mis amigas, que es lo que más me gusta".

Parece que todos son ventajas: más luz, menos gasto eléctrico, días más largos... Sin embargo, no hay rosa sin espinas, y el cambio horario también trae consecuencias, ya que altera el reloj biológico que marca las horas del día y dicta cuándo dormir, cuándo despertarse, incluso cuándo comer. Los que más lo notan son los que tienen niños pequeños: José Bada admite que "el cambio de hora me afecta por mis hijos, que tardan más en adaptarse al sueño". Mientras se adapta y no, o cambia la hora y no, lea más abajo las anécdotas que cuentan seis sevillanos despistados.

 

Testimonios:

José Bada Duarte. Es comercial , tiene 36 años: "Cuando el Sevilla jugaba en Segunda los partidos eran a las doce de la mañana. Recuerdo que me quedé dormido y llegué a un partido en la segunda parte, por no haber cambiado la hora del reloj."

Mercedes Ortiz. Es ama de casa, tiene 34 años: "El año pasado teníamos una reserva en un restaurante para almorzar un grupo de amigos, y perdimos la reserva porque ninguno habíamos cambiado la hora. Al final acabamos tapeando."

José Núñez Asencio. Es escritor, tiene 71 años: "Hace unos años tenía que coger un tren para salir de viaje y olvidé por completo cambiar la hora de forma que cuando llegué a la estación había perdido el tren y tuve que esperar al siguiente."

Helena Suárez Campos. Es estudiante, tiene 20 años: "Me gusta que anochezca más tarde y no me cuesta nada adaptarme al cambio, pero es cierto que siempre olvido cambiar el reloj y he llegado a entrar en clase hasta dos horas tarde."

Francisco Gallardo. Es funcionario, tiene 57 años: "Me he quedado dormido más de una vez y he llegado muy tarde a trabajar porque no había puesto el despertador en hora. Espero que el lunes no me vuelva a pasar lo mismo con el despiste."

María del Valle Martínez. Está jubilada, tiene 65 años: "El cambio de hora no me afecta porque estoy jubilada y no tengo ningún horario, pero una vez me quedé dormida hasta las doce pensando que era temprano y no hice mis cosas habituales."

 

De utilidad:

Qué: Cambio horario de verano. Los días se alargan, hay más horas de sol y se produce un gran ahorro energético.
Cuándo: La madrugada pasada, del sábado 27 al domingo 28, Domingo de Ramos.
Cómo hacerlo: Anoche, a las dos de la madrugada, tuvo que adelantar su reloj una hora, de manera que las agujas marcaran las tres. Si no lo ha hecho, aún está a tiempo, pues el horario de verano se mantendrá hasta el domingo 31 de octubre.
Más información: Si no se aclara con las agujas, o quiere saber más, visite la página www.hora.es. En ella encontrará los cambios horarios de todos los continentes. Y no se preocupe, si llega tarde al trabajo o a una cita, hoy tiene la excusa perfecta.

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