Tailandia y Camboya acordaron el cese de las hostilidades y efectuar patrullas militares conjuntas por la zona fronteriza en disputa situada en torno a las ruinas del templo de Preah Vihear, un día después del enfrentamiento armado que colocó a los dos países al borde un conflicto bélico.
El acuerdo se alcanzó durante la reunión que los jefes militares de las tropas de Tailandia y Camboya desplegadas en la zona y otros miembros del Comité Conjunto Fronterizo, mantuvieron en la localidad de Kantaralak, en la provincia tailandesa de Sisaket, colindante con territorio camboyano.
La reunión se produjo al día siguiente de que dos militares camboyanos murieran y siete tailandeses resultaran heridos durante el intercambio de fuego de artillería y disparos de armas ligeras. "Llevaremos a cabo patrullas conjuntas para prevenir que se repitan incidentes similares", dijo el general Wiboonsak Neeparn, segundo al mando de la comandancia militar de la región oeste de Tailandia y jefe de la delegación de su país.
El general Neeparn señaló al término del encuentro de casi seis horas de duración, que las dos partes acordaron también mantener las tropas y piezas de artillería en las posiciones actuales, y reunirse de nuevo el próximo 21 de octubre en la ciudad de Siem Reap, al noroeste de Camboya. "En la reunión no hemos avanzado mucho, pero las dos partes se han comprometido a mantener sus fuerzas donde ahora están", añadió el jefe militar tailandés.
A pesar del compromiso al que se llegó, el general Neeparn advirtió que las tropas de Tailandia podrían responder con las armas en el caso de se produzca un acto de provocación por parte que las de Camboya. "Tailandia mantiene su promesa, pero si Camboya no lo hace, quizá ocurra lo mismo", añadió el general.
Por su parte, el jefe de la delegación militar camboyana, general Srey Deok, precisó que la iniciativa de realizar patrullas conjuntas de soldados armados prevendrá que ocurran nuevos enfrentamientos.