Tecade es un grupo industrial sevillano con 28 años de historia que se dedica a fabricar grandes piezas metálicas para estructuras como puentes y productos denominados offshore lejos de la costa, tales como plataformas petrolíferas, que vende mayoritariamente en el Mar del Norte, aunque también está trabajando en proyectos españoles, como el nuevo puente de Cádiz.
Esta firma, que lleva dos años y medio instalada en régimen de «autorización» en unas antiguas naves de Astilleros situadas en el Puerto de Sevilla, recibió en febrero una concesión para usar durante los próximos 15 años estas instalaciones, de 10.000 metros cuadrados, en la que actualmente trabajan 80 operarios. En esta planta, que funciona en la actualidad al 35 por ciento de lo que está proyectado que sea su rendimiento en el futuro, se ensamblan las piezas que se fabrican en sus otras sedes de Utrera donde nació esta empresa y en Los Molares donde abrió su segunda planta en 2008.
Ayer sus responsables organizaron una visita a las instalaciones, a la que invitaron al presidente de la Confederación de Empresarios de Sevilla (CES), Miguel Rus, y al alcalde de la ciudad,JuanIgnacio Zoido, en la que además de mostrarles la actividad de su grupo y explicarles sus planes de expansión e internacionalización, aprovecharon para solicitar el apoyo económico de las instituciones para poder adaptar estas instalaciones, diseñadas para el sector naval, a la actividad que Tecade desarrolla, facilitando, entre otras cosas, una salida más directa de las piezas de gran peso y volumen desde la factoría hacia el río. También pidieron colaboración pública en el arreglo de las naves que la Autoridad Portuaria les ha cedido para los próximos 15 años.
Estas instalaciones presentan numerosos desperfectos como irregularidades en el suelo o numerosos orificios en las paredes y en el techo, lo que no sólo afecta al trabajo diario, sino que además da una «mala imagen» ante los inversores que visitan la factoría, según expuso a los medios de comunicación Antonio Camino, director general de Marketing de la empresa.
Según recordó Camino, estas instalaciones «pertenecen al Puerto, no a Tecade», pese a lo cual su grupo tiene previsto invertir en los próximos años cinco millones de euros en mejoras, que se repartirán en tres fases. De esta partida, de momento ya están consignados los primeros arreglos, valorados en 1,5 millones, el próximo año.
El portavoz empresarial destacó que esta nave cuenta con una gran ventaja frente al resto de empresas privadas del sector en Europa, su altura. «No hay otra fábrica con 24,5 metros de altura, lo que nos permite fabricar y vender tubos ensamblados que antes sólo se realizaban en Holanda», comentaban ayer los responsables de la empresa. «Lo que necesitamos es ayuda para potenciar estas oportunidades, adaptando el Puerto a esta modalidad de negocio con una pequeña inversión», indicó Camino.
Tecade factura en la actualidad entre 16 y 18 millones anuales, que ascenderían a 30 si incluyeran la compra de los materiales de sus piezas, que actualmente no realizan. Sus previsiones son alcanzar un volumen de 40 millones, con el material incluido, cuando las instalaciones estén completadas y funcionando a pleno rendimiento, lo que permitiría crear entre 300 y 400 puestos de trabajo. Actualmente la cadena de ensamblaje está funcionando al 35 por ciento y exporta piezas hacia Venezuela y Holanda, entre otros destinos internacionales.
El alcalde se comprometió a canalizar sus peticiones para conseguir la adaptación del Puerto y agradeció el esfuerzo de este grupo, «que empezó con una sede con 200 metros cuadrados en Utrera, con dos trabajadores, y que hoy tienen más de 350 empleados». «Me pongo a su disposición para facilitar todo tipo de gestiones y canalizar ayudas», dijo el primer edil.
En este sentido, recordó que de no haber contado con este espacio en el Puerto, el grupo hubiera llevado esta actividad a otras provincias, por lo que se comprometió a responder a esta apuesta por Sevilla.
Zoido subrayó que, además del puente de Cádiz, Tecade participa en la construcción de otros en Colombia, Linares y además envía grandes piezas para plataformas del Mar del Norte, principalmente los denominados «flotadores» que ayudan al proceso de construcción de estas enormes estructuras, formados por grandes tubos, conectados entre sí, de 50 metros de largo. De hecho, en agosto saldrán por barco, desde estas instalaciones, ocho de estos flotadores hacia el norte de Europa.
