El Consejo de Iglesias (SACC) y la Organización Nacional Cívica (Sanco) de Sudáfrica pidieron ayer a los políticos que ofrezcan un "liderazgo para la reconciliación", tras la conmoción ocasionada recientemente en el país por el asesinato del líder ultraderechista blanco Euegene Terreblanche.
En una declaración difundida ayer de su secretario general, Eddie Makue, la SACC reclamó "un paso adelante" de los partidos políticos nacionales para liderar la reconciliación "necesaria para el país en este momento".
También pide Makue que "ese liderazgo excluya discursos incendiarios o canciones que puedan llevar al país a una espiral de violencia", en referencia a la canción "matar a los boer, matar a los granjeros", un himno del periodo del "apartheid".
Desde hace un par de meses, el líder de la liga juvenil del gubernamental Congreso Nacional Africano (CNA), Julius Malema, entona en sus mítines esa canción, que la semana pasada fue prohibida por los tribunales tras varias denuncias de organizaciones políticas y de defensa de los derechos humanos afrikáner.
"Estamos conmocionados por el asesinato del señor Terreblanche y condenamos y rechazamos cualquier intento de justificar este acto", indicó Makue, que apuntó que este hecho podría incluso "dividir el país".