José María Ruiz-Mateos da la mano a Míchel durante la reunión en su casa.
El Rayo Vallecano va a entrar en concurso de acreedores y sus futbolistas, que no cobran desde hace meses, no se creen las promesas de José María Ruiz-Mateos. La plantilla y el entrenador, José Ramón Sandoval, se han reunido esta mañana con el empresario y después habló el capitán, Míchel, quien anunció que los jugadores van a seguir sin cobrar. El centrocampista también aclaró que "la voluntad de todos" es ascender y que la plantilla no contempla faltar a los entrenamientos ni a los partidos. Y al final, cuando se le preguntó si confiaba en la familia Ruiz-Mateos, el capitán calló unos segundos y respondió: "Por el bien del equipo vamos a seguir luchando". Dicen los medios madrileños que la reunión fue tensa. También hubo tensión la madrugada del jueves en 'El larguero', donde coincidieron otro de los capitanes, Movilla, y la presidenta del club y esposa de Ruiz-Mateos, Teresa Rivero. El jugador desveló que los futbolistas no cobran desde la temporada pasada y la presidenta, iracunda, habló de "calumnia y difamación". "Los jugadores cobran semanalmente y sólo llevan dos semanas sin cobrar. ¿Cuántos clubes hay que no pagan en España?", se preguntó Rivero, que echó en cara a Movilla que hablara en público antes de la reunión de esta mañana.
En el Betis hay dos profesionales muy pendientes de lo que ocurre en el Rayo: Pepe Mel y Rubén Castro. A ambos les debe el club madrileño sus fichas de la campaña pasada.