La manifestación del sindicato de la ultraderecha Respuesta Estudiantil a su paso por la Catedral escoltados por la Policía Nacional. / Por @ManmeRB
Perseguían llamar la atención y lo lograron. El sindicato de ultraderecha Respuesta Estudiantil se manifestó ayer tarde por las calles del centro de la ciudad con todos sus permisos en regla a la vez que lo hacía una organización radicalmente contraria, la Coordinadora Antifascista de Sevilla que acudió de forma espontánea. Sobre aviso estaban los cuerpos de la Policía Nacional y la Policía Local, que desplegaron un amplio dispositivo especial para garantizar la seguridad ciudadana.
Sin embargo, ambas concentraciones que contaban con respaldo legal y comenzaron a diferentes horas acabaron coincidiendo en la Plaza Nueva y, al calor del fuego cruzado de insultos e increpaciones entre miembros y seguidores de una y otra asociación, se desencadenó una fuerte algarada en la que la Policía intervino disparando pelotas de goma para disuadir que propició momentos de tensión entre los manifestantes y también entre el numeroso público que, en la tarde noche de ayer, se encontraba en el centro.
Como consecuencia de todo ello varios policías tuvieron que ser atendidos por heridas de leve consideración. Según fuentes policiales, militantes de ultraizquierda atacaron comercios de la calle Sierpes y la Cuesta del Rosario, dejando a su paso un reguero de cristales rotos. En el Salvador, los antifascistas hicieron volar los servilleteros de los bares como objetos arrojadizos y, a consecuencia de todo ello, la Policía Nacional realizó una detención. El detenido pasará hoy a disposición judicial.
Gritos de fascistas, fachas y nazis fueron proferidos de manera constante por parte de la Coordinadora Antifascista mientras que integrantes de Respuesta Estudiantil principal convocante realizaron saludos con el brazo en alto y corearon lemas a favor de la educación pública, en contra del Ministro del ramo, José AntonioWert, y a favor de España. Además, muchos de sus simpatizantes portaron banderas nacionales y numerosos adornos y simbología patriota, característica de los grupos ultras. Finalmente, la Policía Local tuvo que escoltarles hasta los autobuses que recogieron a los manifestantes en la Puerta de Jerez.
Los usuarios de la red social Twitter, en la que muy pronto comenzaron a verterse informaciones sobre el desarrollo del encontronazo, fueron especialmente críticos con las fuerzas de seguridad, a las que acusaron de proteger con excesivo celo al sindicato Respuesta Estudiantil. Fotografías de bengalas, saludos nazis y un generoso despliegue policial fueron la tónica de la tarde. Alrededor de 200 fueron las personas que secundaron la concentración por parte del sindicato de ultraderecha.
