Tras las explicaciones y la posterior demostración, algunos de los presos lse animaron a torear de salón siguiendo las indicaciones de los maestros. Tal y como explicó Dácvila Miura, desde la condición de foro abierto a personas de toda índole, el Club de Aficionados Prácticos "pretende seguir llevando los valores de la Tauromaquia a rincones y sitios donde pueda resultar más difícil tener una destacada presencia taurina".
Tal y como destacó el torero, "la experiencia vivida ayer puso de manifiesto que hay un gran interés por la fiesta de los toros en grupos o colectivos como la propia cárcel". Para Dávila se trató de "una jornada didáctica y cercana en la que todos pudieron expresar su toreo con capotes y muletas como una medio de expresión artística y deportiva de extraordinario valor".
