Aún queda mucho camino por recorrer, pero España ya se sitúa en cabeza en el desarrollo de tecnologías aplicadas a las plantas termosolares. Y Andalucía, por sus características, se convierte en un codiciado emplazamiento para estos proyectos, colocándose así como referente del sector de las energías renovables.
Un nuevo ejemplo de ello es Gemasolar , la instalación termosolar de 20 mW que Torresol Energy -sociedad participada al 60% por la española Sener y al 40% por Masdar, de Abu Dabi- ha construido en el municipio sevillano de Fuentes de Andalucía y en la que ha invertido más de 240 millones. Aunque la planta lleva operativa desde mayo, será el próximo martes cuando se inaugure de forma oficial, con la visita del Rey Juan Carlos.
Se trata de un proyecto pionero por la nueva tecnología que incorpora, ya que se trata de la primera planta solar comercial del mundo con un receptor central de torre y un sistema de almacenamiento a través de sales fundidas que le permite continuar produciendo electricidad durante 15 horas sin sol, según detalló ayer el presidente de Torresol Energy, Enrique Sendagorta.
La compañía, que tiene tres destinos estratégicos para sus inversiones -España, Abu Dabi (Emiratos Árabes Unidos) y California (EEUU)-, construye además otras dos plantas termosolares en San José del Valle (Cádiz), aunque en esta ocasión emplean tecnología cilindro-parabólica y entrarán en operación comercial el próximo diciembre. Una vez que estén las tres en servicio, se traducirá en una facturación superior a los 120 millones.
La inversión desembolsada en los tres años en los que lleva forjada esta alianza estratégica asciende a 940 millones y se concentra en las tres plantas andaluzas. Pero sus aspiraciones no se limitan a eso.
Sendagorta precisó que "hay planes ambiciosos" para la comunidad, donde prevén desarrollar "dos o tres proyectos más en los próximos años" tanto en el entorno de Fuentes de Andalucía como en el de San José del Valle, para lo que estudian emplazamientos y solventar algunas dificultades, sobre todo, relacionadas con problemas de evacuación de la electricidad a la red.
Claro que para poder cumplir esos objetivos, Torresol tendrá que adjudicarse parte de los 2.300 megavatios (mW) que el plan estatal de renovables contempla que se desarrollen entre 2014 y 2020. Si finalmente entra en el registro de preasignación, la construcción podría comenzar en 2013 como pronto, reseñó. Y cada uno de esos proyectos absorbería una inversión de entre 250 y 300 millones de euros, según la potencia instalada y la tecnología que incorpore.
Aun así, Enrique Sendagorta precisó que el objetivo es que el coste de las plantas se vaya abaratando en torno a un 25% respecto a las primeras.
En este sentido, indicó que la apuesta de Torresol por la tecnología de receptor de torre central y almacenamiento de sales, cuyo diseño se ha realizado en España, cuenta entre sus principales ventajas con que el 85% de los componentes de la planta se han fabricado en nuestro país, generando empleo y riqueza.
Además, confió en que la electricidad generada por la siguiente planta que use esta tecnología "sea entre un 20% y un 30% más barata" que la de Gemasolar. El fin último es que para 2020-2025 la energía termosolar sea plenamente competitiva y no requiera de más ayudas públicas.
Cómo funciona
Los heliostatos reflejan el sol en el receptor, donde se calientan las sales hasta los 565 grados y bajan a un tanque, donde quedan almacenadas
1.800 empleos
Fueron los puestos generados durante los 29 meses de construcción de la planta, capaz de abastecer de electricidad a 27.500 hogares
2.560
Corresponde al número de heliostatos de la central, de 120 metros cuadrados de espejo cada uno, que se extienden sobre 200 hectáreas de superficie