El Ayuntamiento de Torrox, un municipio malagueño de casi 17.000 habitantes, se vio obligado ayer a contratar a un guardia de una empresa de seguridad privada para que vigilara el edificio de la jefatura de Policía Local, y así poder cubrir en parte las bajas por enfermedad de todos los agentes que hay en el pueblo.
La localidad, que se encuentra ubicada en la Axarquía próxima a la costa, cuenta con 34 efectivos policiales en la plantilla, pero en la última semana todos se han puesto de baja, coincidiendo además con las fiestas mayores que se celebran en el pueblo desde el pasado jueves, un día después de la huelga general.
El concejal de Seguridad Ciudadana de la localidad, Manuel Palomas, confirmó ayer que "prácticamente toda la plantilla está de baja", aunque reconoció no estar seguro del número de agentes que había dejado de asistir al trabajo alegando enfermedad. "Tienen varios días para presentar la baja y algunos sí lo están y otros dicen que están enfermos, pero aún no la han traído", explicó. El edil aclaró que ayer por la noche pretendían volver a incorporarse al trabajo cuatro agentes, para salvaguardar la seguridad durante los días de feria. "Esas cuatro eran bajas que ya conocíamos, pero el resto no sabemos a qué son debidas", insistió. El concejal admitió, en declaraciones a Europa Press, que el Ayuntamiento ha tenido que pedir ayuda a la Guardia Civil para "cuestiones de seguridad ciudadana" y a Protección Civil para asuntos del tráfico.
Sin conflictos. Palomas aseguró desconocer los motivos de tantas bajas y negó que haya un conflicto laboral. "Los agentes están al día de los cobros de las horas extraordinarias que han trabajado", dijo. A pesar de lo cual, el edil admitió que no es la primera vez que sucede algo similar, pues una situación parecida ya se produjo en 2008. El edil aclaró que el Ayuntamiento ha pedido al jefe de la Policía Local que efectúe un informe sobre las bajas y anunció que a partir del lunes se actuará "con rigidez". "No podemos dejar que esto, que no sé cómo denominarlo, vuelva a suceder", dijo.
Desde que comenzó la feria el municipio ha contado con un solo agente de segunda actividad para atender la centralita de la jefatura y ayer el Ayuntamiento se vio en la necesidad de contratar a una empresa de seguridad privada para la custodia de este edificio. Tampoco ningún agente patrullaba la madrugada del viernes la feria, en la que se produjo una multitudinaria pelea que se saldó con dos jóvenes heridos por policontusiones, que tuvieron que ser trasladados al Hospital Comarcal de la Axarquía. Torrox está gobernado por Izquierda Unida. La alcaldesa, Antonia Claros, explicó ayer a este periódico que "con el refuerzo de la Guardia Civil de la comandancia de Vélez" esperaban que no hubiera "más altercados en la feria". "A nosotros nos hubiera gustado que se reforzase la seguridad, como otros años. Pero con cuatro agentes podemos controlar la situación", dijo. El recinto ferial se instala en el centro del pueblo, junto a la Plaza de la Constitución.
La regidora aseguró que la mayoría de bajas eran por "gastroenteritis". "La Policía no fue a la huelga general. No hay conflicto laboral, si lo hubiera nos habrían anunciado sus demandas. Pero hasta que no veamos el parte de bajas, no sabremos cómo actuar", concluyó.
