El nuevo equipo de Gobierno municipal escuchó ayer en la Plaza Nueva la protesta más sonora de colectivos profesionales municipales que, tras cinco meses en el poder, consideran que el alcalde, Juan Ignacio Zoido , ya ha tenido tregua suficiente y le toca ahora apechugar con muchas de las promesas hechas en campaña.
Los más madrugadores, y originales, fueron los 500 monitores de los talleres de los distritos que, acompañados de algunos de sus alumnos -sobre todo mujeres mayores- sacaron al andén del consistorio las clases de yoga, pilates, sevillanas o pintura que a partir del lunes comenzarán en los distritos. Los monitores denuncian recortes de hasta el 60% en sus salarios y culpan al ayuntamiento de no controlar que las empresas adjudicatarias, pese a recibir entre 19,5 y 26 euros por cada hora, les paga entre 6,5 y 11,5 euros ampliando así su margen de beneficios a su costa, ya que antes percibían de 25 euros de media y pagaban a los profesores 14 o 15 euros a la hora. Los monitores llevaban varias días solicitando una reunión con el delegado de Participación Ciudadana, Beltrán Pérez, sin éxito. Ayer, tras verlos a las puertas, los recibió durante hora y media aunque según explicó el portavoz del colectivo, Juan Mora, les dijo que desconocía el conflicto y se comprometió a reunirse con las empresas, aunque también les advirtió que la solución para este año es difícil porque los contratos ya están adjudicados. PSOE e IU se solidarizaron con los monitores y coincidieron en que el anterior gobierno llegaba a acuerdos con las empresas para que los sueldos tuvieran un tope.
Mientras Pérez accedió a entrevistarse con este colectivo, y varias decenas esperaban a la puerta el resultado de la reunión, otra concentración, más numerosa, se formó en la Plaza Nueva. Los cinco sindicatos con representación entre los 5.200 trabajadores municipales -CCOO, UGT, CSIF, el sindicato de Bomberos SPB y el de Policía Local Sppme habían convocado una asamblea para reclamar al Gobierno la convocatoria de la mesa de negociación, que no se ha reunido ni una vez desde que el cambio de poder, y el abordaje en las mismas de "problemas que vienen de antes y otros nuevos", como la cobertura de vacantes, explicó el presidente del Comité de Empresa, Manuel Loza. En concreto, uno de estos nuevos problemas es que el ayuntamiento ha anunciado que aplicará el límite a la tasa de reposición que impuso el año pasado el Estado en los Presupuestos Generales y que imitó la Junta:solo se cubrirán el 10% de las vacantes por jubilación, fallecimiento o promoción interna. Los sindicatos denuncian el recorte de plantilla y el deterioro de los servicios públicos que ello supone, y sobre todo arremeten contra la "imposición". Su protesta también logró un primer efecto:hoy está convocada la mesa. Reclaman a Zoido que cumpla sus promesas antes del 20-N.