Transcurridas veintiocho jornadas, el Sevilla ocupa la undécima plaza, un lugar bastante lejos del que se podía pensar antes de que comenzara la temporada, pero lo cierto es que en esta Liga tan disputada, los nervionenses aún mantienen opciones de entrar en Europa e, incluso, de meterse entre los cuatro primeros clasificados, aunque, eso sí, la empresa es harto complicada.
El equipo de Míchel, tras la victoria lograda el jueves en Santander, se encuentra a cuatro puntos del equipo que marca la frontera de los puestos europeos, el Espanyol -con el que se encuentra empatado el Osasuna- y a ocho del Levante, que ocupa la cuarta plaza empatado a puntos con el Málaga. Una diferencia amplia pero que, no obstante, puede ser enjugada si se acaba la irregularidad que ha demostrado el Sevilla durante todo el ejercicio y solventa, como hizo ante el Racing de Santander antes de ayer, los encuentros que le restan hasta que acabe la Liga.Ante sí, el equipo nervionense tiene diez jornadas para arreglar el despropósito en el que se está convirtiendo la temporada y, en ellas, deberá medirse a cinco equipos que están por encima en la tabla y otros cinco que están por debajo.
Atendiendo a la situación clasificatoria de los rivales, el Sevilla se encuentra ante un mes clave de competición, ya que jugará en los próximos treinta días ante cuatro equipos que están por debajo suya en la tabla, siendo partidos que debe solventar si quiere aspirar realmente a jugar en Europa por noveno año seguido. El Granada pasado mañana, el Mallorca el Lunes Santo, el Zaragoza el 12 de abril y el Getafe el 16 serán piedras de toque que delimitarán de qué es capaz el Sevilla. Entre medio, el Domingo de Resurrección, los de Míchel se batirán el cobre con el Athletic Club de Bilbao de Marcelo Bielsa, que le recibirá en San Mamés con el goal average a favor después de la victoria que logró en el Sánchez Pizjuán el pasado mes de noviembre. La recta final será más complicada ya que de los cinco rivales que se enfrentarán al Sevilla entre el 22 de abril y el último partido de Liga, que tendrá lugar el 13 de mayo, cuatro marchan por encima suya. El sorprendente Levante, a día de hoy el faro en el que fijarse para aspirar a la Liga de Campeones, visitará el Sánchez Pizjuán el sábado de Preferia, mientras que en el domingo de Feria los nervionenses visitarán en el Santiago Bernabéu al casi inaccesible Real Madrid, que puede estar jugándose el título en esas fechas. Tras la Feria, el Sevilla recibirá al Real Betis Balompié en jornada intersemanal, siendo el eterno rival el único contrincante de la recta final que marcha actualmente por debajo de los blanquirrojos. El penúltimo encuentro será ante el Rayo Vallecano en casa, mientras que, como ocurriera el año pasado, los nervionenses despedirán el Campeonato Nacional de Liga en el feudo del Espanyol en el que puede ser un partido clave.
No son buenos los precedentes antes estos diez rivales, ya que en la primera vuelta el Sevilla apenas fue capaz de lograr nueve puntos, una cifra insuficiente si se tiene en cuenta las aspiraciones del club. En la ida, los sevillistas sólo lograron ganar al Zaragoza y al Getafe, empataron ante el Mallorca, el Espanyol y el Betis, y cayeron ante los otros cinco.
