A.Martín / I.Domínguez
Una persecución policial terminó en tragedia en la carretera de Palos (Huelva). Un vehículo robado que huía de la Policía colisionó con un coche en el viajaban su conductor y una temporera rumana a la que había cogido en la carretera minutos antes. La tercera víctima fue un ciclista.
El accidente se produjo en torno a las 20.30 horas en la carretera que une Palos de la Frontera con el núcleo costero de Mazagón. El fatídico siniestro fue causado por un todoterreno de lujo, donde viajaban dos ciudadanos rumanos y un subsahariano. Huían de la Policía tras haber sustraído el vehículo a las puertas de un estanco en Palos de la Frontera.
A la altura de la finca Las Madres, colisionó frontolateralmente con el coche en el que viajaba una mujer rumana, que volvía de realizar unas compras, y en ese momento se apeaba del vehículo que la había cogido tras hacer autostop. El conductor, un vecino de Punta Umbría, también perdió la vida.
En la colisión, este último turismo alcanzó a su vez a un ciclista, natural de Ponferrada (León), que se alojaba en un hostal de la localidad palerma. Su bici y su casco permanecían anoche en el arcén dando testimonio de la tragedia.
La mujer fallecida, Marinache F., llevaba cinco años acudiendo a trabajar a la campaña fresera, con contratos de nueve meses. Una de sus compañeras lamentaba ayer su muerte, que se produjo después de haberse desplazado a un supermercado para adquirir comida para su hijo de 20 años, que justo ayer había llegado procedente de Valencia.
Mientras un grupo de temporeros marroquíes, rumanos y subsaharianos observaban atónitos los coches siniestrados, los bomberos se afanaban pasadas las diez de la noche en intentar recuperar uno de los cuerpos de los fallecidos, que permanecía atrapados en el vehículo.
Efectivos de la Guardia Civil detuvieron primero a los dos rumanos, que supuestamente habían sustraído el todoterreno de lujo y pese haber intentando huir, mientras que un subsahariano consiguió escaparse entre los pinos en un primer momento. Aunque finalmente fue también detenido. Los individuos fueron trasladados al hospital Juan Ramón Jiménez de Huelva, donde ingresaron por las heridas que presentaban, custodiados por la Guardia Civil.
El riesgo de los temporeros. La carretera A-494 que une Mazagón con la localidad de Palos de la Frontera se ha convertido en un peligro constante para todos los temporeros que se desplazan hacia sus lugares de trabajo, bien a pie o haciendo autostop, como es el caso de la ciudadana rumana fallecida.
Muchos son los inmigrantes que se trasladan en plena noche de vuelta a las fincas, tras su jornada laboral, corriendo un elevado riesgo de atropello por la escasa visibilidad de la zona.
La trágica noche de ayer provocó que un colectivo de trabajadores, desplazados al lugar del siniestro, expresase su malestar por la peligrosidad de la vía y la escasa red de comunicaciones que existe entre ambas poblaciones. Las miradas de los presentes mezclaban dolor y rabia por el "abandono" que sufren al carecer de una línea de autobuses.
