Pese a que aseguraba que los mantendría, Tussam ha retirado los expedientes que mantenía abiertos a siete trabajadores por la huelga de 2007, en la que resultaron dañados varios vehículos, después de que la Audiencia de Sevilla confirmara el sobreseimiento de la vía penal por falta de pruebas.
La empresa municipal de transportes Tussam ha decido dar por extinguidos los expedientes abiertos a siete trabajadores tras la huelga de 2007 en la que resultaron dañados varios vehículos. La decisión se ha producido después de que la Audiencia Provincial de Sevilla haya confirmado definitivamente, y por cuarta vez, la decisión del Juzgado de Instrucción número 13 de archivar la vía penal contra estos siete empleados por falta de pruebas "contundentes".
Así lo trasladó el vicepresidente de la entidad, Guillermo Gutiérrez, al Consejo de Administración de la empresa, que se reunió ayer, pese a que Tussam ha insistido en reiteradas ocasiones que mantendría los expendientes aunque la vía judicial se archive. Sin embargo, tras la decisión de la Justicia la asesoría jurídica de la empresa señaló que no era posible continuar con los expedientes laborales.
Las diligencias del Juzgado de Instrucción 13 se abrieron tras la denuncia de Tussam contra ocho trabajadores (uno de ellos se quitó la vida en noviembre de 2008). En un primer momento, la juez archivó el caso, aunque la Audiencia lo reabrió tras admitir una de las pruebas propuestas por la empresa municipal, consistente en una rueda de reconocimiento con los agentes de la Policía que intervinieron para disuadir los actos vandálicos del 21 de mayo de 2007.
Sin embargo, los policías no fueron capaces de reconocer a ninguno de los empleados de Tussam, por lo que el juzgado volvió a archivar la causa. La empresa de transportes recurrió en dos ocasiones hasta que, recientemente, la Sección Primera de la Audiencia, en un auto al que tuvo acceso Europa Press, afirmó que si bien es cierto que del atestado y de las declaraciones de varios agentes "se presume la participación en daños a autobuses" de los conductores, uno de los policías limita su testimonio a que los aludidos "cogían objetos y los lanzaban hacia los autobuses" sin llegar a dar por seguro que los proyectiles "alcanzaban o impactaban" en los vehículos.
"Sus declaraciones no son concluyentes", por lo que la Audiencia concluyó que, pese a las diligencias practicadas, "no puede imputarse un hecho concreto a una persona determinada" a tenor de que los agentes reconocían que "había mucha gente reunida en la zona de las cocheras" cuando sucedieron los hechos.
Por su parte, el secretario del sindicato ASC, Isidro Fernández, explicó que si bien la decisión de Tussam "llega tarde", revela "un cambio de actitud" por parte de la directiva. Fernández expresó que el sindicato hace "una lectura positiva" de esta decisión, advirtiendo que tras el archivo judicial de la causa "no tenía sentido" continuar con los expedientes laborales.
