Con la dura huelga de Tussam habrá bastantes menos oportunidades de ver una estampa como ésta en el Real de la Feria.
Tussam se prepara para una dura huelga durante la próxima Feria. Tras un nuevo desencuentro con los sindicatos, esta vez en el Centro de Mediación, Arbitraje y Conciliación (Cemac) para definir los servicios mínimos, el paro se da casi por seguro. La empresa, que ha propuesto que trabaje un 70% de la flota, estudia una batería de medidas para atenuar el impacto en los ciudadanos de la huelga -similares a las puestas en marcha hace dos años-. Entre ellas, la ampliación del aparcamiento del Charco de la Pava, un incremento de los autobuses lanzaderas ya privatizados y el diseño de una ruta de carriles bus que una el Prado con el Real para incrementar la velocidad de servicio de la línea especial.Hace dos años, antes de la última convocatoria de huelga, el Ayuntamiento decidió privatizar la lanzadera que une el recinto ferial con el Charco de la Pava, donde se ubica el principal aparcamiento para la Feria. Este sistema se mantendrá este año, lo que libera de los paros una de las líneas más frecuentadas, y da un mayor margen al Ayuntamiento: Tussam se apoyará en este modelo para tratar de atenuar el impacto de las movilizaciones de los trabajadores. Se están realizando estudios, a través de la empresa Aussa, que tiene la concesión del estacionamiento en superficie, para incrementar su capacidad y ampliar el recinto. Al mismo tiempo, se están entablando conversaciones con la empresa adjudicataria del servicio de lanzaderas para que lo refuerce e incremente el número de plazas.
Este sistema se complementará con una medida que ya se puso en marcha en 2008: la creación de una ruta de carril bus especial desde el Prado hasta el recinto ferial, de forma que los vehículos tengan una mayor velocidad de circulación. Se trata de aprovechar al máximo los servicios mínimos que finalmente establezca la Junta de Andalucía. La empresa ha pedido un 70% y los sindicatos, un 30%. Aunque todo depende de la Consejería de Empleo, en 2008, con un escenario similar, se establecieron unos servicios mínimos del 50%.
Pero en los últimos dos años ha entrado en el escenario un nuevo actor: el Metro de Sevilla. Los sindicatos lo esgrimen para justificar que los servicios mínimos se reduzcan, y la empresa quiere recurrir al suburbano para paliar los efectos del paro. Tussam mantendrá conversaciones con la Junta de Andalucía para que refuerce sus servicios. Lo mismo que intentó en el Domingo de Ramos. En aquel momento Metro de Sevilla alegó su incapacidad para incrementar las unidades. En Feria, además, éstas están al máximo y de hecho durante las fiestas del año pasado se alcanzó el récord de viajeros en un sólo día y los trenes llegaron a saturarse por completo.
"Tenemos claro que no vamos a vulnerar el derecho de huelga, pero al igual que ocurrió un año con la lanzadera del Charco de la Pava, tendremos en cuenta lo que ocurra este año para el servicio del Prado", explicó el vicepresidente de Tussam, Guillermo Gutiérrez, quien abrió así las puertas a que en ejercicios posteriores se privatice también la línea de lanzaderas entre el Prado y la Feria, uno de los servicios más rentables para una empresa en una situación económica crítica y al borde de la quiebra.
De momento, no están previstas conversaciones entre la empresa y los sindicatos, después de que el comité de empresa pusiera una batería de condiciones para volver a negociar, entre ellas la anulación del concurso para privatizar líneas o un cambio de interlocutores ante sus desencuentros, pero la empresa mantiene abieerta la vía del diálogo: "Estamos abiertos a la negociación y a llegar a un acuerdo porque esta huelga no tiene sentido. La externalización de líneas está para da de momento y sólo afectará a las nocturnas, y aunque es cierto que se le debe dinero a trabajadores, es fruto de la situación de la empresa, y no afecta a las nóminas sino a pluses".
