Local

Tussam plantea quitar este año la tarifa de viaje sin transbordo

El billete sencillo subiría a 1,25 céntimos y el título mensual pasaría a costar 34

el 30 jun 2010 / 17:59 h.

TAGS:

El Gobierno local ha iniciado ya las negociaciones para impulsar un incremento de las tarifas de Tussam, que se pretende aprobar en las próximas semanas para que pueda entrar en vigor antes del cierre del año. Las propuestas son aún iniciales y pueden sufrir modificaciones, pero ya han sido trasladadas formalmente a los distintos grupos municipales y a agentes sociales, según varias fuentes consultadas.

El nuevo marco tarifario que empieza a tomar forma en este proceso contempla por primera vez la desaparición del concepto de viaje sin transbordo, de forma que en todos los títulos recargables el coste del viaje sea igual: 70 céntimos. Al mismo tiempo se elevará el coste del billete sencillo, que pasará a costar 1,25 euros y se incrementará el título mensual casi un 13%, de 30 a 34 euros.

La primera parte de esta modificación de las tarifas supone la culminación de un proceso iniciado hace ya más de un año, cuando se implantó en Sevilla el título recargable que eliminó los tradicionales bonobús con y sin transbordo. Pese a esto, entre 2009 y 2010 se ha mantenido un precio distinto para aquellos viajes que se realicen sin transbordo y para aquellos en los que haya cambios de autobuses. Ahora se unificarán y se situarán en 0,7 euros. Si se mantuviera el sistema antiguo, el bonobús, con diez viajes, pasaría a costar 7 euros.

El segundo elemento incluido en la propuesta supone un incremento de en torno a 5 céntimos del billete sencillo, un título de viaje que Tussam tiende a penalizar desde hace años. Se trata de fomentar otros títulos y dejar este billete prácticamente para personas que usan de forma aislada el transporte público o visitantes. En estos casos, el objetivo es acercar al máximo el precio del billete al coste de transportar un viajero, estimado en torno a 1,3 euros. Con esta revisión se acerca y se queda en 1,25.

El tercer elemento afectado por la revisión de las tarifas es el título mensual, que ya en la última modificación de precios quedó reducido a las personas empadronadas en Sevilla para dejar fuera a todos aquellos usuarios que llegan de municipios del área metropolitana en líneas del Consorcio. Será el que experimente la mayor subida, un 13% -de 30 a 34 euros-, si bien es cierto que en la revisión de 2008 a 2009 -la última que se ha hecho- fue el que menos se vio afectado y apenas se incrementó su coste de 28 a 30 euros.

Todas estas modificaciones, no obstante, están aún sujetas a debate. La dirección de Tussam quiere impulsar los nuevos precios de bus con el mayor consenso posible, pero al mismo tiempo con cierta premura. Pese a que desde el Gobierno local se planteó aplazar el incremento de las tarifas hasta 2011, la empresa considera que sus cuentas están ya en un estado lo suficientemente crítico como para no soportar cerrar 2010 sin una revisión de precios. A partir de hoy se aplica la subida del IVA, que incrementará aún más los precios del combustible.

El objetivo a medio plazo sigue siendo integrar las tarifas de Tussam en los precios del Consorcio Metropolitano de Transportes, que precisamente hoy se revisan para aplicarles una subida que dejará el billete sencillo en 1,2 euros -el mismo precio que tiene ahora mismo el título urbano en Sevilla-. Pero para completar este proceso es necesario ajustar los sistemas tarifarios, bien consiguiendo que el Consorcio acepte el sistema de Tussam, bien aplicando en la empresa municipal de Sevilla el complejo sistema metropolitano con decenas de zonas y tarifas. Esta homogeneización podría quedar así para el año que viene, mientras que en este ejercicio se podría realizar un primer acercamiento en los precios.

La subida de Tussam se produce cuando la empresa se encuentra casi al borde de la quiebra y con un plan de saneamiento de las cuentas paralizado por los desencuentros entre la dirección de Tussam y los sindicatos. Durante todo 2009, la sociedad trató de cerrar un acuerdo interno que incluyera un plan de recortes de los gastos, especialmente los de personal, una redefinición de las transferencias del Ayuntamiento y una revisión de los precios del servicio. Tras tambalearse el primer pilar, que derivó incluso en una huelga y en la dimisión del por entonces vicepresidente Guillermo Gutiérrez, todo el proceso se paralizó, lo que desembocó en la congelación de precios durante todo 2009 y el primer semestre de 2010.

En este tiempo el debate no se ha abandonado, y de hecho los dos socios de gobierno, al igual que los sindicatos e incluso distintos agentes sociales, tienen asumido desde hace meses que la subida es inevitable. Sólo faltaba ajustar las formas y concretar los nuevos precios con un acuerdo que, aunque no está cerrado, empieza a ultimarse con el objetivo de empezar a aplicarlo cuanto antes.

  • 1