El último informe de la Cámara de Cuentas sobre el dinero que mueve al año la Junta de Andalucía evidencia que en 2008 la administración sufrió el primer déficit en sus cuentas desde hacía siete años. En 2008 el resultado presupuestario fue negativo, y se registró un agujero en las cuentas públicas de 1.147,35 millones de euros. "Ahí encontramos los primeros efectos de la crisis. El remanente de tesorería sigue siendo positivo (2.544 millones), pero ya se anunciaba una disminución de fondos líquidos como indicio de lo que estaba por venir", dijo ayer el presidente de la Cámara, Rafael Navas, poco después de entregarle el documento a la presidenta del Parlamento, Fuensanta Coves.
El dato más revelador, según Navas, fue el que la Junta autorizase una emisión de nueva deuda de 762,59 millones de euros, que terminaría alcanzando los 1.528,14 millones, una vez que el Consejo de Política Fiscal y Financiera le diera luz verde.
Este déficit se explica principalmente por la caída de los ingresos, sobre todo porque el mercado inmobiliario quedó paralizado hace dos años, se dejaron de vender viviendas y, en consecuencia, la recaudación por el impuesto patrimonial cayó considerablemente (un 43,65% menos que en 2007: 647 millones menos en transmisiones patrimoniales).
Además, según la Cámara, en los últimos años los gastos de personal han ido en aumento, la administración cada vez cuenta con más empleados laborales, interinos y cargos de confianza que conllevan un importante zarpazo a las cuentas públicas. De 2007 a 2008 hubo 483 contrataciones nuevas, un 9,6% más y el gasto total de plantilla alcanzó los 5.519 millones de euros.
El resultado presupuestario negativo de la Junta es el primero que se produce desde 2001, año en el que el déficit fue mucho menor que el de ahora: 2.532 millones de pesetas, según el órgano fiscalizador independiente. Todavía en 2007, la administración andaluza contaba con un excedente positivo de 767 millones de euros, lo cual agudiza aún más la visión de que la crisis golpeó brutalmente los ingresos de la Junta de un año para otro.
créditos sin pagar. En parte por esta razón una de las recomendaciones que la Cámara de Cuentas le hace a la administración en su informe es que aplique nuevos criterios para obtener los "derechos de cobro de difícil o imposible recaudación". Cuando la Junta concede un crédito y tarda en cobrar la deuda, se cataloga como un derecho de cobro difícil si después de cinco años aún no le han devuelto el dinero. La Cámara cree que, en época de crisis, debe aplicar otros criterios: "el deterioro de la situación económica general y la evolución del saldo de los derechos pendientes de cobro y de su recaudación en este ejercicio aconsejan aplicar criterios más depurados para la estimación de la cuantía".
Navas adelantó a los periodistas que uno de esos criterios podría ser una lista pública con las empresas o instituciones que más tardaban en devolver el crédito a la Junta, y tenerlas en cuenta para futuras operaciones.
El informe de la cuenta general de la Junta habla de unos créditos definitivos de 35.005 millones de euros. Del Fondo de compensación interterritorial, a Andalucía le correspondió 1.337 millones de euros, un 1% menos que el año anterior.