Sólo faltan tres días para que el Betis asalte la temporada 2012-13 y Pepe Mel continúa con sólo cuatro jugadores nuevos en su plantilla, a saber: Agra, Rubén Pérez, Juan Carlos y Campbell. Salvo sorpresa inesperada, los tres primeros serán titulares y el costarricense se perderá la visita al Athletic porque jugó con su selección en la pasada madrugada (hora española) y volverá a Sevilla con poco margen para que el entrenador lo incluya en la alineación. A falta de otros refuerzos, el míster utilizará a todos los que tiene y planteará el resto del once con hombres a los ya que conoce de la pasada campaña o de los dos años que acumula ya en el timón de la nave verdiblanca. No le ha ido mal, ahí están el ascenso y la permanencia como la mejor confirmación posible, y este nuevo Betis será en realidad una reedición del Betis de la 2010-11 y la 2011-12. Eso engloba a los jugadores con más peso específico, los que tradicionalmente son calificados como intocables. En el Betis los hay y las pruebas apuntadas ayer por Mel corroboran que seguirán siéndolo.
El esbozo de equipo planteado por el entrenador madrileño durante la sesión matinal hace titulares a Casto; Chica, Paulao, Dorado, Nacho; Beñat y Rubén Pérez. Delante, con Agra y Campbell ausentes aunque el portugués regresó ayer a la ciudad, sólo hay que ver los amistosos veraniegos para suponer que el extremo diestro también será titular, con Juan Carlos por la otra banda, quizá Pozuelo o Jonathan Pereira por detrás del delantero y, por supuesto, Rubén Castro como nueve no titular sino titularísimo. Los elementos imprescindibles en el Betis de Mel son Paulao, Dorado, Nacho, Beñat y Rubén Castro.
La condición de fijos de estos cinco profesionales es indudable para el aficionado que haya seguido este último bienio del Betis, pero está bien respaldar la impresión ocular con la solidez que dan las estadísticas, que para eso están. Y resulta que los números son incluso más significativos que la simple opinión. Para empezar, Nacho y Rubén se han intercambiado el liderato en el ranking de minutos jugados en estas dos campañas: en la 11-12 ganó el lateral, 3.308 minutos frente a los 2.954 del delantero, y en la 10-11 se impuso el canario, 3.743 minutos (de 3.780 posibles, así que sólo se perdió 37 minutos en todo el campeonato, una marca increíble) contra los 3.055 del malagueño. Sumando los dos ejercicios, Rubén ha tenido 6.697 minutos y Nacho, 6.363. Eso supone el 93% de los minutos en el caso del atacante y el 88% en el del defensa.
Las matemáticas también convierten en intocables a Dorado y Beñat. De nuevo en la clasificación por minutos, el central fue tercero en la última campaña (2.891') y cuarto en la penúltima (2.914'), mientras que el centrocampista subió a la cuarta plaza en la 11-12 (2.634') después de ser octavo en la anterior (2.521). En todo caso, el vasco fue esencial en el ascenso y así lo prueba su participación en 36 de los 42 encuentros; el factor diferencial en su contra fue su déficit físico, que lo llevó a ser sustituido antes de tiempo en la mitad de esos partidos.
Queda analizar la intocabilidad, valga el término, de Paulao, que apenas ha compartido una cuarta parte de la era Mel pero ya es otro de los imprescindibles. Llegando como llegó en enero, el brasileño participó en 17 partidos de Liga. Jugó 16 completos y en realidad sólo se perdió uno, la visita al Málaga.
