El Real Círculo de Labradores estaba ayer a rebosar. Ninguno de los socios había olvidado lucir sus mejores galas. En el acto -enmarcado dentro de las actividades organizadas con motivo del 150 aniversario del club-, el alcalde descubrió un busto del Rey y alabó la "cultura tradicional a la par que moderna" de los sevillanos.
El Real Círculo de Labradores de Sevilla festejó ayer uno de los principales actos que se enmarcan dentro del 150 aniversario del club con el descubrimiento de un busto del Rey por parte del presidente del club, Antonio Rodríguez de la Borbolla, y el alcalde de Sevilla, Alfredo Sánchez Monteseirín. Rodríguez de la Borbolla señaló que "desde que se fundó el Círculo de Labradores grandes personas los han dirigido", reflejando la "calidad humana" de todos los presidentes que ha tenido el club sevillano.
Tras la suntuosidad de los enormes pilares de mármol, el mobiliario del más puro estilo rococó y la balaustrada del patio, el edificio que se encuentra situado en pleno Centro de la ciudad - en el número uno de la calle Pedro Caravaca-, hay una larga historia. En su día fue sede provisional de la hermandad del Gran Poder, albergó la Academia de Bellas Artes y posteriormente fue edificio de Correos.
El alcalde de la ciudad, Alfredo Sánchez Monteseirín, quiso hacer su aportación en el acto añadiendo con su discurso que "Sevilla es una ciudad de tradiciones históricas muy marcadas pero que quiere seguir avanzando en el mundo moderno". "Los sevillanos lo tienen claro: la dualidad tradición y modernidad son posibles en esta sociedad que avanza según las nuevas exigencias de las tecnologías", concluyó. Un claro ejemplo de ello son las actividades deportivas que se realizan en el club y de las cuales han salido deportistas de élite que han conseguido alcanzar diplomas olímpicos y 33 medallas en los campeonatos del mundo.
Desde que se inauguró, el Círculo de Labradores en 1859 y posteriormente, en 1917 el Rey Alfonso XIII le concediera el título de Real, han cambiando mucho las formas pero el carácter tradicional y el fondo son de las pocas cosas que aún perviven. Y ayer se vio reflejado en el momento del descubrimiento del busto del Rey, obra de Fernando Aguado, cuando todos los presentes entonaron el himno español.
