Después de varios meses de obras, por fin, es inaugurado el parque de la Huerta del Hospital y el nuevo centro cívico de San Francisco. Se trata de un ambicioso proyecto del Ayuntamiento de Morón de la Frontera que cuenta con la oposición de muchos de los vecinos debido al descontento con la propuesta para este rincón del casco antiguo.
El proyecto contemplaba la remodelación del antiguo huerto de los religiosos del convento de San Francisco, de manera que lo que antes eran unas cocheras de titularidad municipal se abren ahora como un gran mirador, con zonas verdes y juegos infantiles. Con un presupuesto de más de un millón de euros se remodeló así una importante parte del casco antiguo. "Hemos querido volver a mirar a la Huerta del Hospital y lo hacemos con un magnífico espacio de ocio y esparcimiento para todos los moronenses, y en especial para los vecinos de San Francisco, y con un pulmón en pleno corazón de la ciudad", destacó Alfonso Angulo, el primer teniente de alcalde. En la misma línea, continuó: "Toca ahora a todos cuidar de este magnífico parque situado en un lugar cuatro veces centenario, y dotar a este nuevo centro cívico de vida, para lo que se trasladarán aquí las concejalías de Juventud y Deportes".
El proyecto de recuperación de la Huerta del Hospital y construcción de un paseo con un mirador en la calle San Francisco es el más importante del mandato, por lo que en la transformación de la ciudad representa. Sin embargo para la asociación de vecinos, estas actuaciones se han hecho "de manera unilateral", ya que en 2008 plantearon un proyecto de ordenación, totalmente distinto y que no se tuvo en cuenta, según apuntan desde el propio colectivo.
Otro problema es el aparcamiento, un inconveniente que afectaría no sólo a la barriada sino a toda la ciudad por la cercanía al centro hospitalario. Consideran que los estacionamientos son pocos en comparación al gran paseo, máxime en un enclave situado en el centro. No obstante, y a pesar de la oposición de cierto sector de la población, el día de la inauguración gran cantidad de abuelos y nietos se divertía en las atracciones de este nuevo parque con los juegos infantiles y, de hecho, los vecinos tomaron el lugar para estudiar el cambio.
El sentir general era que este espacio "ha ganado mucho con el gran cambio", o al menos ésta era la frase más escuchada entre las numerosas alabanzas que recibió la transformación del antiguo huerto. Eso sí, ahora piden que se cuide y se "mantenga en las mismas condiciones", un reto en el que la colaboración de los vecinos es fundamental.
