Un hombre de 37 años fue atropellado mortalmente en la madrugada del sábado cuando cruzaba la A-92 a la altura de Pablo VI, frente al cementerio de la ciudad. El conductor del vehículo, que dio positivo en la prueba de alcoholemia, ha sido imputado por un delito contra la seguridad vial pero aún se investiga cómo se produjo el fatal accidente.
Nadie sabe por qué el joven -cuya identidad no ha trascendido pero que, según los vecinos, vivía en el barrio alcalareño de Pablo VI- estaba cruzando en torno a las 0.35 horas por la calzada de la autovía A-92 y no por los pasos peatonales que existen en la zona. Las causas del trágico accidente están siendo investigadas por el equipo de atestados de tráfico de la Guardia Civil de Sevilla.
Uno de los testigos presenciales confirmó a este periódico que el conductor del turismo (un Megane de color gris plata que circulaba en sentido Málaga) afirmó que ni siquiera había visto al hombre cruzando la autovía. Así, relataron que oyó un golpe seco y detuvo el vehículo de inmediato para descubrir que había atropellado a una persona. La parte delantera del coche quedó completamente destrozada
Varios conductores pararon sus vehículos, cortaron el tráfico y llamaron de inmediato a la Policía Local, que puso en marcha todas las alertas. En apenas diez minutos se habían desplazado hasta el lugar de los hechos, además de los agentes locales, una patrulla de la Guardia Civil y una ambulancia del 061.
La persona que avisó del accidente comunicó al servicio de emergencias que el hombre atropellado parecía estar con vida aunque con heridas de gravedad. Lamentablemente, los sanitarios que atendieron a la víctima comprobaron al llegar al lugar del accidente que había fallecido de inmediato a causa del tremendo golpe, por lo que nada pudieron hacer por salvarle la vida. El servicio de emergencias también tuvo que atender al conductor del turismo, que sufrió una fuerte crisis nerviosa.
Según un testigo presencial, que circulaba en un vehículo cercano, el hombre circulaba a unos 100 kilómetros por hora, la velocidad permitida en esta vía. Algunos testigos apuntaron también que otro vehículo había logrado minutos antes esquivar al fallecido.
La investigación. La Guardia Civil y la Policía Local alcalareña han abierto ya las correspondientes diligencias para esclarecer las causas y las circunstancias en las que se produjo el atropello.
Ha trascendido que el joven fallecido podría contar con antecedentes policiales y tenía varias detenciones en su haber por robos y pequeños hurtos. Así, una de las líneas de investigación se basa en la posibilidad de que el hombre cruzara la autovía para cometer algún delito en alguna de las naves que jalonan toda la autovía. Los testigos presenciales han confirmado que el fallecido llevaba un pequeño destornillador con mango negro que quedó tirado en la carretera tras el atropello.
Tras el levantamiento del cadáver por parte del juez, los restos mortales del fallecido fueron trasladados hasta el Instituto Anatómico Forense de la capital hispalense, donde permanecerán hasta que se les realice la correspondiente autopsia.
