El Sevilla anunció tras los incidentes que protagonizaron algunos violentos en Rota que se tomarían medidas para erradicarlos de la grada del Sánchez-Pizjuán. Tras suspender la renovación de abonos durante tres días, el consejo de administración emitió ayer una nota con las medidas que se tomarán para controlar el acceso a la grada de Gol Norte. Muchas medidas en número, pero algo tibias tras el revuelo levantado.
En primer lugar, el Sevilla hará una campaña de sensibilización entre sus socios para dar a conocer los perjuicios causados a la entidad por los aficionados violentos. Además, en la nota aclaran que estas medidas no se dirigen especialmente al colectivo que se dedica a animar al equipo -el grupo Biris Norte- y sí a los violentos.
Entre otras medidas, los abonados de la grada baja de Gol Norte tendrán que tener un carnet con fotografía personal. El club recomienda que se acceda a esta zona del estadio con una hora de antelación para facilitar las estrictas medidas de control de acceso que se han establecido. Para el acceso a las gradas alta y baja de Gol Norte existirán puertas independientes y exclusivas. Además, el club velará para que cada abonado de esta zona ocupe el asiento que tiene asignado, retirando el carnet al que no lo haga de esta manera.
Para la renovación de abonos, sólo los que han ocupado esta zona en la pasada temporada podrán renovar sin problemas. Los que deseen cambiar de zona del estadio deberán cumplir el requisito de haber sido abonado en las últimas cinco temporadas. Más difícil lo tendrán los nuevos abonados que quieran ver el fútbol desde la grada baja de Gol Norte, ya que deberán ser presentados por dos abonados con cinco años de antigüedad que no hayan sido sancionados y que deberán responsabilizarse de cualquier incidente que pudiera provocar el nuevo abonado.
Los aficionados con expediente disciplinario con sanciones graves o muy graves tampoco podrán abonarse a esta zona y, además, no saldrán a la venta entradas en esa zona.
Además, el consejo acordó la incoación de expediente disciplinario, con retirada cautelar del carnet, a los abonados que participaron en los incidentes de Rota. Aun así, el club informó de que alguno de los aficionados identificados por la pelea del viernes pasado no son socios del club.
El director general José María Cruz explicó tras la reunión en los medios del club que las medidas se han tomado "para identificar y erradicar a los violentos de nuestro estadio". "Estamos tremendamente satisfechos de la afición del Sevilla, que es una de las mejores del mundo y que crea un ambiente extraordinario. Pero al mismo tiempo se nos ha identificado por las comisiones antiviolencia como tenedores de un problema que es tener aficionados violentos y se nos ha insistido en que debíamos tomar medidas drásticas para erradicarlos", indicó el consejero.
Sobre los incidentes de Rota, Cruz explicó que "algunos no figuran como abonados del Sevilla, lo cual no quiere decir que no accedan al estadio de otro modo".
Remodelado el consejo. Antes de la decisión sobre los aficionados de Gol Norte, el cónclave decidió realizar modificaciones en el consejo de administración que rige los destinos de la entidad sevillista.
Concretamente, se confirmaron las salidas del órgano directivo de los ya exconsejeros Pedro Ellauri y Santiago Balbontín, que formaban parte de éste desde los años 2003 y 2006 respectivamente.
A cambio, se ha incorporado José María Manzano, de 54 años, y socio del club desde hace varias temporadas. En su profesión de notario ha trabajado en varias ocasiones para la entidad de Eduardo Dato. Tras esta acción, el consejo pasa a ser formado por un consejero menos, siendo doce las personas que regirán los designios del Sevilla.
