Esta semana mi propuesta es el Puratasca... César, Cayetano y Raúl son padres de este espacio honesto, donde "la tapa es libertad". Se posiciona en los primeros puestos de bares visitados donde tomarse una tapa. Cocina de mercado, producto o temporada les valdrá para referirse a la cocina de Puratasca. El deleite de los que nos gusta el comer clásico con pinceladas de modernidad, sobre todo en su presentación.
Está en la calle Numancia en Triana. Las tapas rondan entre los 3 y los 9 euros, el vino por copas a partir de 2 euros. Todas escritas, con tiza en la pared de pizarra... De diseño, para nada vanguardista, inspirado en los años 70. "Un local chic con toque autóctono del arrabal", aseguran. Sus responsables intentan volver a lo tradicional de nuestraciudad, aquellas tascas de barrio donde tomarte un buen vino y una buena tapa, donde no estaba reñida la calidad con el precio.
Alimentos de primera, de nuevo coincido con el día de proveedores. Hoy, entre otros, ha llegado mi amigo Juan Periáñez, cargado de exquisiteces de seta y voletus... un placer visual ver esas casitas de enanitos, tan primorosas en colores, formas, texturas y de gran sabor. Le sorprenderá la calidad, en su amplio sentido. Desde la materia prima,vinos o tapas ya elaboradas, hasta el excelente servicio. Ocho personas uniformadas se mueven a sus anchas por la barra y cocina, como si estuvieran programados. Tienen todos los alimentos a la vista, fíjense en la calidad. ¡Incluido el cocinero! Un máster cheff en directo.
En Puratasca puedes comer un Bacalao confitado al pilpil de hongos; un arroz meloso con voletus y magret de pato; piruletas de chorizos, un clásico; las verduras en tempura con pluma ibérica y mojo picón; los fideos con pato, los raviolis frescos o el tradicional montadito con pan alveolado, ¡crujiente, crujiente! Los postres de Manuel Jara son exquisiteces elaboradas en "exclusiva". Trabajos creativos que les dejarán extasiados.
¡Ojo a la presentación! a 3 euros. Para el mes de las flores ¡un nuevo parto! Esperan ansiosos abrir las puertas de su establecimiento en el barrio de El Arenal, muy cerquita de Las Atarazanas, donde nuevas propuestas culinarias nos harán esperar.