Un hombre de 30 años sufrió ayer quemaduras de segundo y tercer grado en el 90 por ciento de la superficie corporal tras rociarse con gasolina y prenderse fuego a lo bonzo en una céntrica calle de Almería. Fuentes del servicio andaluz de emergencias, detallaron que el suceso se produjo pasadas las 16.00 horas en la confluencia entre la calle Granada y la Avenida Vilches.
Numerosas llamadas de vecinos de la zona y transeúntes alertaban al 112 de la presencia de un hombre "envuelto en llamas" tras lo que se activó a Policía Local, Policía Nacional, los facultativos del servicio de emergencias sanitarias 061 y una dotación del Parque de Bomberos. Cuando los efectivos llegaron al lugar de los hechos, la víctima, al parecer de nacionalidad rumana, permanecía postrado "en la acera, con los ojos abiertos" después de que varios ciudadanos hubiesen conseguido apagar las llamas con una olla de agua y una manta.
Tras ser atendido de urgencia, fue evacuado en UVI móvil hasta el complejo hospitalario de Torrecárdenas, en el que ingresó pasadas las 16.30 horas con pronóstico reservado. Fuentes de la investigación precisaron que el hombre habría decidido prenderse fuego a lo bonzo tras mantener una discusión en el domicilio familiar con su pareja sentimental, con respecto a la que le consta una orden de alejamiento por malos tratos.
El 4 de septiembre del pasado año tuvo lugar un caso similar en Castellón, cuando otro hombre, también de nacionalidad rumana, se prendió fuego frente al edificio de la Subdelegación del Gobierno y falleció finalmente en noviembre en el hospital donde estaba ingresado. El ciudadano se quemó para protestar por la situación económica de su familia en España.
