Sin aspavientos y sin que casi la ciudad se haya inmutado, Álvaro Siza (Matosinhos, 1933) es desde ayer maestro de la Universidad de Sevilla . Porque maestro es la palabra que mejor define a este arquitecto portugués cuyo carta de presentación es su sencillez, el manejo soberbio del dibujo y la capacidad de diseñar edificios que se funden con su entorno. El que fuera Premio Pritzker en 1992, aceptado como el Nobel de la arquitectura, fue investido ayer como Doctor Honoris Causa de la Universidad de Sevilla a propuesta de la Escuela Superior de Arquitectura, donde Álvaro Siza es venerado como uno de los mejores, si no el mejor, arquitecto vivo. La Escuela cierra de la mejor manera posible la celebración de su medio siglo de existencia.
En un breve discurso de tan sólo cuatro folios sin traducir del portugués, Siza agradeció a la Hispalense y a la Escuela de Arquitectura el Honoris Causa. Fiel a su necesidad vital de huir de cualquier tipo de estridencia o grandilocuencia, el "poeta de la arquitectura", como ha llegado a ser definido, terminó dando las gracias a Andalucía de la que "recibí mucho y di poco".
El arquitecto Víctor Pérez Escolano fue el encargado de glosar la figura de Siza, del que destacó, entre otras muchas cosas, su "portentoso dominio del dibujo". "Álvaro Siza se declara ciudadano del mundo y arquitecto de todos sus lugares", señaló. Pérez Escolano no quiso pasar por alto el "compromiso político y la acción profesional" del arquitecto portugués, al que la Revolución de los Claveles marcó profundamente.
RECONOCIMIENTOS. Galardonado con el Premio Pritzker en 1992; con la medalla Alvar Aalto; el Mies van der Rohe, o el Príncipe de Gales, que concede la Universidad de Harvard, la suya es una trayectoria sin doble lenguaje. Todo es arquitectura, y todo, responsabilidad.
La misma con la que trabajará en el proyecto de abrir una nueva puerta en la Alhambra y sobre el que Pérez Escolano aventuró que Siza sorteará como nadie la "tensión entre innovación y creación". "El presente, el futuro de Álvaro Siza en Andalucía, será con lo mejor de él, en el mejor lugar de Andalucía si no de España". Por su parte, el rector de la Universidad de Sevilla, Joaquín Luque, afirmó: "Con este Honoris Causa, es la Universidad de Sevilla la que se premia al contrar entre sus doctores con un gran humanista de la Arquitectura, un sabio difícil de encasillar en las corrientes arquitectónicas al uso, una persona que, pese a la fama y la altísima cotización de sus obras, jamás ha abandono su compromiso con la arquitectura social, con la humilde vivienda". Luque lanzó una sugerencia que, teniendo en cuenta que los edificios de autor (caso de la malograda biblioteca del Prado) no son muy bien recibidos en Sevilla, se antoja lejana: "No tenemos ningún edificio con la firma de Siza, aunque gozamos con lo mejor y más valioso: su incuestionable magisterio".
