Un amplio dispositivo formado por bomberos, ambulancia y helicóptero acudió al kilómetro 562 de la N-IV.
El turismo de un vecino de Dos Hermanas se empotró ayer poco después de las 11.00 horas contra el camión que conducía un hombre de Soria, a la altura del kilómetro 562 de la N-IV, entre la localidad nazarena y Los Palacios, precisamente el mismo sitio en que falleció el pasado marzo otro conductor en idénticas circunstancias. En esta ocasión, el conductor del turismo resultó herido de gravedad con un traumatismo cranoencefálico y fue trasladado al hospital Virgen del Rocío por un helicóptero del 112, que acudió al lugar del accidente junto a la Guardia Civil y los Bomberos de ambos municipios. Agentes del Instituto Armado regularon el tráfico durante dos horas, mientras se restablecía el carril ocupado en sentido Cádiz por el siniestro que provocó colas de casi cinco kilómetros. Los bomberos, por su parte, tuvieron que rescatar a la víctima del coche debido a la violencia del impacto. 
El turismo después del siniestro.
Así se estrenaba septiembre en este tramo convertido ya en un punto negro de las carreteras españolas, aunque sin calificar como tal, a pesar de constituir el único tramo de la N-IV sin desdoblar entre Madrid y Cádiz. Se trata de unos 80 kilómetros entre Dos Hermanas y Jerez de la Frontera, donde sólo en la última década han fallecido en accidentes 91 personas. En lo que va de verano, esta vía ha registrado cuatro accidentes, con un balance de dos muertos y once heridos.
El pasado mes de junio, tras el último accidente mortal, se reactivaron las reivindicaciones de la Corporación municipal de Los Palacios, que lleva esperanzada en el desdoble desde que en 2006 asomara por los Presupuestos Generales del Estado una partida para ello, la misma que desapareció en cuanto irrumpió la crisis. Desde entonces, tras cada accidente resucitan las voces que piden al menos la supresión del peaje de la autopista AP-4, que discurre paralela. En junio, el alcalde palaciego, Juan Manuel Valle, envió una corona de flores mortuoria a la ministra de Fomento, Ana Pastor, y aseguró que le remitiría una por cada víctima mortal, una medida que el PP local censuró sólo en cuanto a «las formas», aunque su portavoz, Antonio Romero, achacó a sus propios compañeros a nivel provincial su falta de contundencia reivindicativa. El PA, por su parte, organizó una marcha andando por la carretera y hasta uno de sus concejales, Emilio García, la recorrió decenas de veces en bicicleta para exigir su desdoble. Pero las reivindicaciones terminaron en ruptura del consenso político cuando Valle organizó un acto por su parte colocando una lápida simbólica en el kilómetro 565.
El alcalde ha convocado para el miércoles, a las 13.30 horas, una junta de portavoces para consensuar medidas reivindicativas con todos los grupos políticos. «Ya lo consensuamos antes del verano», señaló Valle, «pero lo que tenemos que hacer es ya no parar». La consigna sigue siendo la misma: o desdoble o supresión del peaje.
