La familia de Amy Fitzpatrick, la joven irlandesa desaparecida el 1 de enero en Mijas, entregó ayer a la Guardia Civil un supuesto mensaje de la joven que había aparecido en una página web de Internet y que fue publicado por un periódico irlandés. La Guardia civil corroboró que el contenido del documento no era cierto y que responde a una broma de "mal gusto e inapropiada".
La madre de Amy, Audrey Fitzpatrick, expresó su malestar por la aparición de estos mensajes que "no aportan nada al caso" y acrecientan el dolor de la familia.
La Guardia Civil continúa con las batidas de búsqueda de pistas que ayuden a desvelar el paradero de la joven. Aunque no se han encontrado datos significativos, la familia todavía mantiene la esperanza de volver a verla, a pesar de que hoy se cumplen cuatro meses de su desaparición.
Hace dos meses y medio, el entorno familiar de Amy ofreció una gratificación económica a todo aquel que aportase una pista fidedigna sobre su paradero y realizó un llamamiento para que cualquier persona que tuviera algún dato contactase con ellos o con la Guardia Civil con el compromiso de que la información sería tratada con máxima confidencialidad.
Los padres de la desaparecida aseguran que la chica se había ausentado en otras ocasiones de casa pero nunca más de dos o tres días y que siempre había telefoneado para decir donde estaba.
Amy fue vista por última vez sobre las 22.00 horas del pasado 1 de enero, cuando salió de casa de una amiga, donde ambas habían cuidado del hermano pequeño de ésta última para dirigirse a su domicilio familiar.
