El tamaño de una rotonda es la cuestión de fondo que impide que el Puente Viejo, rehabilitado hace dos años después de haber permanecido cerrado desde 1979, pueda reabrir al tráfico. La Junta consensuó con el Ayuntamiento hacer una rotonda de 60 metros para canalizar su tráfico, pero el Estado pide ahora que mida 80.
No es que al Ayuntamiento de La Algaba le importe hacer una rotonda más grande, como exige la Dirección General de Carreteras, sino que para ello es necesario invadir el término municipal de La Rinconada y proceder a expropiaciones. El objetivo de la rotonda es unir el también conocido como Puente Rodríguez de la Borbolla con la A-8006.
El propio alcalde, José Luis Vega (IU), se lamentó de que estén "otra vez como en el punto de partida" y exigió a la Delegación Provincial de Obras Públicas que "tome las riendas" en este asunto para que se pueda abrir al tráfico una infraestructura que solucionará muchos de los atascos en este entorno, con más de 500 viviendas recientemente construidas. Precisamente, la promoción de la empresa Fadesa fue la que pagó la rehabilitación del puente, mediante un convenio urbanístico y este trabajo "puede ahora echarse a perder porque tras tanto tiempo cerrado se está deteriorando ya que también es objeto de vandalismo y, al no dársele uso, no se garantiza su mantenimiento", prosiguió el alcalde.
Por ello está a la espera de celebrar una reunión con la nueva delegada provincial del ramo, Salud Santana, para abordar el nuevo proyecto, que incluye la supresión de la actual rotonda de desvío hacia La Rinconada y la construcción de una sola glorieta que cumpla los dos servicios.
La idea del mandatario es conseguir el compromiso de Obras Públicas de impulsar el acuerdo entre los dos municipios para la construcción de la citada rotonda.
Un veterano. El puente en su configuración actual data de 1936, aunque su proyecto es original de 1913. La construcción del puente se realizó en tres etapas: 1913-1923, 1924-1926 y 1934-1936. Esto se debió a los daños que sufrió la estructura en las avenidas del río Guadalquivir. Se trata de un puente metálico constituido por cuatro vanos de 40 metros de altura cada uno. Es, en definitiva, una infraestructura emblemática en la comarca de la Vega y forma parte de su paisaje. Sin embargo, tuvo que ser cerrado hace 29 años por problemas de seguridad graves.
