Joan Plaza será esta tarde centenario en el banquillo de San Pablo, al cumplir la redonda cifra de 100 partidos de Liga ACB como entrenador del Banca Cívica, al que arribó en el verano de 2009 para sacarlo del marasmo en que llevaba sumido varios ejercicios.
Fue llegar el barcelonés y cambiar la suerte de un equipo que ya en su debut amarró Copa y play-off y que, tras trocar en el siguiente esos logros por el subcampeonato de la EuroCopa, en este tercer asalto calca la línea que trazara dos años atrás, esto es, clasificación para el torneo del KO y, en esas anda, para la fase final por el título liguero.
Sellar ese (pen)último objetivo de la temporada pasa, y bien que lo recalca siempre el técnico, por hacerse fuerte en casa. Sin embargo, así han venido dadas las cosas, en esta segunda vuelta el conjunto sevillano flaquea en San Pablo –un triunfo en sus últimas cinco comparecencias ante su afición– de igual modo que lejos de su público adquiere un semblante rocoso y efectivo, el que le ha permitido enlazar cuatro victorias como forastero para recuperar terreno y colarse en la octava plaza.cambio de dinámica.
Toca, por tanto, revertir la racha casera con un triunfo ante el Blu:sens Monbus que le haga escalar algún puesto o, cuando menos, dejar atrás a los perseguidores Unicaja y CAI, ávidos de arrebatarle ese puesto de privilegio.
Los gallegos llegan con la permanencia encauzada, con tres victorias de margen sobre la zona de descenso, en un buen momento (tres victorias en cinco jornadas) y con Lasme, Kendall y Corbacho (sí, el que le hizo seis triples al Caja en Santiago) como amenazas. Nada de ello debe impedir que el Banca Cívica se reconcilie con su afición y aspire a todo.
