Un tercio de los caramelos que se lanzaron durante la Cabalgata el pasado 5 de enero se quedaron tirados en el asfalto de las calles. Así lo anunció ayer Lipasam, la empresa municipal de limpieza, que destacó que los equipos especiales recogieron ese día 25.700 kilos de residuos (sobre todo caramelos) de las vías por las que pasaron los Reyes Magos, y que no habían sido recogidos por los espectadores del cortejo. Si se tiene en cuenta que desde las carrozas se lanzaron unos 80.000 kilos, tenemos que se quedaron en el suelo el 32% de los caramelos.
Aún así, este año Lipasam recogió menos residuos tras el paso de la Cabalgata, concretamente 32.000 kilos menos. La principal explicación es que se lanzaban menos caramelos (la cifra bajó en unos 10.000 kilos con respecto a 2009), además de que creció la cifra de juguetes, peluches y bolsitas de golosinas y gusanitos, que según Lipasam son más apreciados y no se quedan abandonados.
En las labores de limpieza participaron 147 operarios de Lipasam y 45 vehículos de recogida de basuras, constatándose el triunfo de las bolsitas de chucherías: no se quedó en el suelo ninguna de las 100.000 que se llegaron a lanzar, según asegura la empresa municipal de limpieza. Se calcula que fueron unas 600.000 personas las que, animadas por la ausencia de la anunciada lluvia, presenciaron el paso de la Cabalgata que organiza el Ateneo.
Pero éste no fue el único cortejo que salió estos días. Los 53 kilos recogidos por Lipasam son los restos de todos los cortejos de Reyes Magos que recorrieron la ciudad, incluidas las 27 cabalgatas de barrio que recorrieron las calles la mañana del día 6. Para dar cobertura a los diferentes itinerarios de las cabalgatas, el Ayuntamiento puso en marcha un dispositivo especial que permanecerá en funcionamiento hasta hoy, día 8 de enero.
Entre los distintos cortejos, y dado que cada año concita a más gente, la Cabalgata de Triana tiene su propio plan específico de limpieza, muy similar al que discurre una vez que pasa la Cabalgata del Ateneo. En su seguimiento y limpieza participan 90 operarios y 21 vehículos.
Entre las cabalgatas de barrio, que lanzaron más de 55.000 kilos de caramelos y otros 60.000 obsequios en forma de juguetes, la empresa municipal de limpieza de Sevilla ha recogido hasta el momento 28.200 kilos de basura, en torno a un 40% menos que el año pasado, cuando se recogieron más de 45.000 kilos. En el caso de las cabalgatas de barrio, Lipasam ha tenido que recoger más de la mitad de los caramelos que se lanzaron. Aun así, la reducción del número de dulces lanzados, tanto en la Cabalgata del Ateneo como en las de los barrios, ha hecho que se reduzcan considerablemente los residuos recogidos, lo que Lipasam agradeció públicamente ayer.