Las más de mil toneladas de fuel vertidas el domingo por un petrolero ruso amenazan con desencadenar una catástrofe ecológica en las costas rusa y ucraniana del estrecho de Kerch, que separan los mares Negro y de Azov.
"Se mantiene la amenaza de contaminación de las costas rusa y ucraniana del estrecho de Kerch", que comparten Rusia y Ucrania, informó el Ministerio de Situaciones de Emergencia de Rusia.
La mancha de fuel vertida por el petrolero "Volganeft" -unas 1.300 toneladas, según estimaciones oficiales- alcanzó orillas rusas en las primeras horas de la mañana del lunes, según informaron las autoridades portuarias rusas.
"La mancha -12 kilómetros de largo- ya llegó a la orilla. Las aves se posan sobre el fuel y mueren", aseguró Alexandr Dovgal, director adjunto de la filial de la Corporación Portuaria Rusa en Tamansk, citado por la agencia Interfax.
Debido a la peor tormenta de los últimos treinta años, el "Volganeft", que transportaba 4.077 toneladas de fuel, se partió en dos en la madrugada del sábado al domingo cerca del puerto ruso Kavkaz, en pleno corazón del estrecho de Kerch. Los 13 tripulantes del petrolero sobrevivieron a la rotura del casco y fueron rescatados horas después del accidente.
Vientos de hasta cien kilómetros por hora y olas de cinco metros convirtieron el domingo a ese puerto ruso en zona de catástrofe. Un total de cinco embarcaciones naufragaron, 23 marineros resultaron desaparecidos y más de 30 barcos tuvieron que resguardarse de la tormenta en los puertos de la zona.