Tres miembros de una familia mueren por una posible intoxicación alimentaria

El 061 fue de madrugada para atender a la menor, tuvo que regresar para asistir al padre y halló muerta a la niña. La hija menor está ingresada en el Virgen del Rocío con pronóstico reservado, con náuseas y vómitos.

Por Jose Gallego y María José García La ingesta de comida en mal estado pudo ser la causa del fallecimiento ayer de tres personas de una misma familia –padre, madre y una hija– que soportaban una dramática situación económica y que vivían de la recogida de cartones en la localidad de Alcalá de Guadaíra. La Junta de Andalucía decretó por la tarde la alerta sanitaria y el caso está siendo investigado judicialmente bajo secreto de sumario. La otra hija de la pareja permanecía anoche hospitalizada con pronóstico reservado en el hospital Virgen del Rocío con vómitos y náuseas. Imagen tomada ayer del hospital de Valme donde fallecieron el padre y la madre de la familia intoxicada en Alcalá de Guadaíra. / RAÚL CARO  (EFE) Imagen tomada ayer del hospital de Valme donde fallecieron el padre y la madre de la familia intoxicada en Alcalá de Guadaíra. / RAÚL CARO (EFE) Todo lo que rodea a esta tragedia familiar es algo oscuro por lo extraño que resulta que tres personas fallezcan por una posible intoxicación alimentaria y porque los equipos sanitarios tuviesen que acudir en dos ocasiones hasta el domicilio de estas personas, ubicado en la calle Pesadora, de la humilde barriada de Rabesa, en Los pisos blancos. De hecho, ayer por la mañana, los miembros del servicio de Pediatría del Hospital de Valme estaban consternados y no descartaban que en la primera atención que se prestó a esta familia en la vivienda hubiese podido producirse una negligencia por no apreciar la gravedad, indicaron a este diario testigos presenciales. Según el relato de la Consejería de Salud, el centro coordinador de urgencias y emergencias sanitarias de Sevilla recibió a las 2.55 horas de la pasada madrugada una llamada procedente de un domicilio de Alcalá de Guadaíra, en la que se solicitaba asistencia por un cuadro de náuseas y vómitos en una niña de 14 años. Hasta el lugar se desplazó un equipo móvil del dispositivo de cuidados críticos de urgencias de Alcalá de Guadaíra, compuesto por un médico, un enfermero y conductor, quienes atendieron a la menor que en ese momento era la única que se encontraba mal. Según las mismas fuentes, el equipo de emergencias cuando abandonó la casa la menor estaba estable y no requería pues hospitalización. Posteriormente, a las 9.09 horas de ayer, el centro coordinador de urgencias y emergencias de Sevilla atendió una nueva llamada en la que se solicitaba asistencia sanitaria desde el mismo domicilio, pero en esa ocasión para atender al padre. Se envió nuevamente un equipo móvil del dispositivo de cuidados críticos y urgencias que al llegar al lugar se encontró a dos adultos en estado grave y a la niña de 14 años en parada cardiorrespiratoria, sin que le pudiesen hacer nada por salvarle la vida. Ante la gravedad de la situación, los profesionales de urgencias solicitaron de inmediato un segundo equipo sanitario que se desplazó hasta la vivienda y se procedió al traslado del padre E.C., de 61 años, y a la madre, C.B, de 50 años, al Hospital Universitario de Valme, donde ingresaron en la unidad de cuidados críticos. La menor de la familia, la pequeña de 13 años, fue trasladada a la unidad de cuidados intensivos del Hospital Infantil del Virgen del Rocío, donde al cierre de esta edición estaba estable, según fuentes de Salud. La madre y el padre, finalmente, fallecieron a las 17.15 horas y a las 18.00 horas, respectivamente, según fuentes sanitarias. Para determinar la causa o causas de la muerte, el equipo de Salud Pública de la Delegación Territorial de Igualdad, Salud y Políticas Sociales realizaron ayer una encuesta epidemiológica y se personó en el domicilio familiar donde realizó una toma de muestras. Hasta la vivienda también se desplazaron agentes de la Policía Nacional que también recogieron muestras de comida que se encuentran bajo investigación judicial y que serán analizadas desde el punto de visto toxicológico y microbiológico. Mientras tanto, se ha declarado la alerta sanitaria (Red de Alerta de Salud Pública), Según informaron vecinos de Rabesa, esta familia no era originaria de Alcalá de Guadaíra, sólo llevaba viviendo en la localidad unos años, aunque indicaron que la mujer tenía familiares en la barriada alcalareña de El Cerero. El hombre era conocido como El Tuerca y a causa de los problemas económicos que padecía su familia acudió en el mes de octubre a solicitar el salario social, informaron fuentes municipales. A pesar de las estrecheces que sufrían no eran unas personas que frecuentasen los Servicios Sociales del Ayuntamiento. Los vecinos aseguraron que era una familia “buena” y que no causaba problemas. Las niñas están escolarizadas en un instituto de la zona, al que acudían a diario. Señalaron que el piso que habitaban era propiedad de un banco.

  • 1