Muchos lectores se conmovían la pasada semana con la imagen de un burro que ilustraba esta web después de haber sido rescatado por la Guardia Civil de una finca de Los Palacios y Villafranca en la que vivía, junto con otros animales, en unas penosas condiciones de abandono y maltrato. Y es que no todos los burros pueden tener la misma suerte que el célebre Platero con su Juan Ramón Jiménez.
De hecho, al año miles de estos animales son maltratados y abandonados a su suerte en toda España. Es por ello, que en 2003 se estableció en Andalucía una asociación con sede en Morón de la Frontera dedicada a recuperar a estos animales. Su objetivo no es otro que proporcionar cuidados, protección y seguridad permanente, en cualquier lugar de España, a burros que necesiten atención "a resultas de mala salud, maltrato, situación delicada, mal uso y otros casos similares", según expone Rafael Benjumea, miembro de esta asociación. Este hombre subraya también que desde que empezó la crisis están recibiendo mayor número de animales "debido a que sus propietarios no pueden hacerse cargo de ellos".
Pese a que desde Morón de la Frontera se coordina todo el trabajo, la granja está en Fuente de Piedra (Málaga), desde donde, no solo cuidan a estos animales, sino que también los preparan para ofrecer terapia a niños con necesidades especiales. Más de 250 se han visto beneficiados por esta asnoterapia, que aunque suene un poco menos glamourosa que la hipoterapia está resultando igualmente exitosa y ofrece a estos menores "el desarrollo de habilidades, mejorando el uso del lenguaje y las lesiones de espalda", según sus promotores. En general, las sesiones se desarrollan en el zoológico de Córdoba, por la propia idiosincracia de la asociación que tiene un amplio radio de acción, aunque visitan otros lugares si se lo solicitan.
Como se trata de una asociación sin ánimo de lucro, realizan diferentes actividades para poder financiar tanto el mantenimiento de la granja como estas sesiones. Entre las más importantes se encuentra la promoción del apadrinamiento de burros. Por tan solo 15 euros, se puede presumir de ser el padrino del entrañable Julito Iglesias o de la coqueta Estrella, una burra que encantada espera el encuentro con sus niños en las instalaciones de este refugio.