Un mínimo. El Parlamento andaluz nunca ha aprobado una cifra de la deuda histórica. No hay un pronunciamiento formal sobre la misma, pero la Junta ya ha hecho pública la horquilla en la que la sitúa: entre 1.148 y 1.742 millones. El máximo es fruto de los cálculos de la Consejería de Economía, pero el mínimo es la herencia política que recibió el vicepresidente Griñán cuando volvió a Andalucía. Fue la cantidad utilizada por PSOE y PP en los años de la confrontación de Junta y Gobierno. Sale de sumar los anticipos que anualmente no se dieron a Andalucía. Es una cifra política.
Dos máximas. Arenas respeta dos premisas en política: evita la agresividad con el contrario cuando sale de una reunión y se resiste a bendecir a la Junta con acuerdos y fotos. Ambas se han cumplido ya en lo poco que va de legislatura: fue cordial tras verse con Chaves, pero ni por despiste pactará la deuda.
¿Y la portavoz? La cifra se ha hecho esperar mucho, pero no eclipsa el tema que más preocupa: la crisis económica. La sorpresa de Chaves de subir a la tribuna a exponer sus medidas, obligó a Javier Arenas a darle la réplica el miércoles. Sobre la deuda histórica intervino en nombre del PP, Antonio Sanz. ¿Y la portavoz del PP? Esperanza Oña estuvo fuera de los dos grandes debates.
Conjeturas. Dos consejeros de la Junta califican de "conjeturas" las valoraciones que hace un juez de Almería sobre la acción de la Junta en El Algarrobico. Esas "conjeturas" están en 22 folios en los que se detallan, con fechas y referencias a la ley, decisiones administrativas. Y una evidencia incontestable: un edificio gigante construido a ojos de todos en plena playa.
Maternidad. Una diputada del PSOE está a punto de dar a luz. No tiene derecho a darse de baja. El Parlamento estudia una fórmula para que pueda votar desde casa, pero aún no hay nada definitivo. La mayoría del PSOE no es tan holgada como para correr muchos riesgos.
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