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Una década aliviando a los costaleros

El centro de Las Sirenas innova con acupuntura y plataformas vibratorias. Ver vídeo

el 01 abr 2010 / 21:06 h.

El centro de atención al costalero de la Casa de las Sirenas, que este año cumple una década tratando de aliviar los dolores que sufren los costaleros al meterse debajo de los pasos, ha incluido esta Semana Santa la acuputura y las plataformas vibratorias como métodos de terapia. El centro, promovido por el Colegio de Fisioterapeutas, abre cada año desde el Domingo de Ramos al Sábado Santo y en esta edición ya ha atendido en torno a 400 costaleros. Desde su creación no ha dejado de incorporar novedades: el año pasado fueron los vendajes musculares que se emplean en los deportes de élite para corregir las posturas.


Ahora se trata de utilizar las agujas de la acupuntura “para combatir el dolor” después de una jornada bajo las trabajaderas, para luego seguir trabajando de forma correcta las posibles lesiones, según explicó a Europa Press el coordinador del centro, Isaac del Real. Las plataformas vibratorias, en cambio, “sirven para la descarga del músculo y para evitar la fatiga”.


Del Real explicó que el centro trata de incorporar todas las técnicas deportivas que puedan aliviar el sufrimiento después del ingente esfuerzo físico de los costaleros. Ya se ha intentado, durante 10 años, informarlos sobre la mejor forma de situarse bajo el paso para evitar una lesión, para lo que se editan folletos informativos con las posturas recomendadas y las que se deben evitar.


Los fisioterapeutas que trabajan en el centro también emplean técnicas más convencionales, como los masajes, los estiramientos o la mesoterapia; la “electroterapia con ondas de baja y media frecuencia”; y por último, los aparatos “de infrarrojos y ultrasonidos”. La idea es tratar de facilitar la vuelta a la normalidad de los costaleros tras el esfuerzo realizado.


Francisco, un costalero que saca cuatro pasos durante la Semana Santa, explicó que sus dolencias se centran en “la espalda y la cintura”, por lo que acudió al centro “para quedar mejor con un masaje” y estar en forma para su próxima estación de penitencia, al tiempo que recomendó a cualquiera “que tenga alguna molestia” que visite el dispositivo, “porque de aquí se sale bastante mejorado, tienen unas manos estupendas”.


Por otro lado, la Unión de Consumidores UCE ha calculado que vestirse de costalero cuesta como mínimo 60 euros –150 euros los nazarenos–, que pueden elevarse mucho según la calidad del tejido de camisetas o costales pintados o bordados, prendas de abrigo realizadas y diseñadas expresamente y fajas y correajes deportivos de alto rendimiento.

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