La ministra de Fomento, Ana Pastor, firmó ayer con el alcalde, Juan Ignacio Zoido, un acuerdo para abonar a la ciudad los 7,2 millones de euros que aún le debía elGobierno por la regeneración urbanística del antiguo barrio de Regiones Devastadas, cuyas viviendas fueron demolidas para levantar 220 nuevos pisos protegidos en esta zona, rebautizada como Nuevo Amate. Esta operación, promovida desde el año 2009 por Fomento y el Consistorio, tuvo un presupuesto de más de 20 millones, repartidos entre ambas administraciones, aportando el Ejecutivo central unos 15,5 millones, y la corporación local, más de cuatro. Después de que el ministerio abonase en los últimos ejercicios 8,4 millones como primera entrega, Pastor acordó ayer saldar definitivamente la cantidad restante en dos plazos. Según explicó la propia ministra, el 45% de estos 7,2 millones serán transferidos de forma inminente al Consistorio, mientras que el 55% restante será ingresado cuando Urbanismo concluya las obras y justifique los gastos con las correspondientes facturas. Zoido destacó ayer que este conveniotermina la financiación del proyecto de Cerro Amate, si bien avanzó que este programa de renovación de «infravivienda» continuará en otras zonas como Los Pajaritos, donde destacó que ya se ha comenzado a actuar, o en elParque Alcosa. La ministra resaltó que éste «es uno de los acuerdos más importantes» en los que participa en Estado en materia de rehabilitación de viviendas, pues ha supuesto la creación de 220 viviendas repartidas en cinco bloques, además de la reurbanización de todo el entorno y la instalación de nuevas zonas verdes y equipamientos. «Hacemos un esfuerzo en tiempos de crisis para garantizar el derecho a la vivienda», remarcó. Ambos dirigentes señalaron que las obras de mejora del barrio están prácticamente terminadas, si bien aún se deben rematar algunos trabajos relacionados con el ajardinamiento y la colocación de equipamientos urbanísticos, aunque no concretaron plazos. Los inquilinos de las antiguas viviendas protegidas de Regiones Devastadas, todos ellos arrendatarios, fueron realojados en viviendas municipales como medida transitoria y a la espera de que los citados 220 pisos estuviesen acabados y entregados, algo que ocurrió en septiembre de 2013. Una vez listas las nuevas viviendas protegidas, los datos ofrecidos el pasado mes de enero por el Ayuntamiento, según informa Europa Press, señalaban la entrega de 104 de las 220 viviendas y reserva en otros 15 casos, siendo destinadas las restantes 101 VPO al procedimiento reglado de adjudicación de viviendas protegidas. Buena parte de los inquilinos originales, así, no ejerció su derecho a habitar las nuevas viviendas y optaron por permanecer en las viviendas de realojo que les fueron asignadas. Estas viviendas protegidas fueron también tomadas ilegalmente hasta que la amenaza de un proceso judicial depuso la actitud de los ocupantes. Al margen del acuerdo, el alcalde pidió ayer a todas las administraciones colaboración en la rehabilitación de infraviviendas de la ciudad.Cabe recordar que ya demandó a la Junta que participase en el proyecto promovido para derribar las 524 viviendas sociales municipales del barrio de Los Pajaritos y construir en su lugar viviendas de nueva planta para las familias que habitan estos inmuebles protegidos. Todo ello mientras comenzaba el derribo de las 96 viviendas que componen las manzanas ocho y nueve de todo este conjunto de viviendas.