Una mujer de 53 años fue detenida ayer como supuesta autora de la muerte a puñaladas de su marido, de 57 años, que fue hallado sin vida por la hija de ambos en el domicilio conyugal, en Gójar (Granada), informaron a Efe fuentes de la Guardia Civil. Los hechos tuvieron lugar en el número 25 de la urbanización Los Cerezos del municipio granadino, hasta donde se desplazaron efectivos sanitarios y de la Guardia Civil, que ha abierto una investigación para esclarecer los hechos.
sFue la hija de ambos, de 30 años, la que poco antes de las 6.00 horas encontró el cadáver de su padre apuñalado en el pecho y, junto a él, a su madre, que fue detenida como supuesta autora de la muerte, para lo que habría empleado un cuchillo, según las fuentes. La mujer sufre al parecer una enfermedad mental «y quizá ha podido ser ésa la causa de la agresión», indicó a Efe el subdelegado del Gobierno, Santiago Pérez.
Tras el hallazgo, la mujer fue trasladada a un centro sanitario bajo custodia de la Guardia Civil para ser tratada de un ataque de ansiedad, según el instituto armado. La arrestada pasará a disposición judicial en las próximas 72 horas.
Al ayuntamiento no le consta ninguna denuncia de maltrato o requerimiento de ningún tipo de ayuda a los servicios sociales por parte de esta familia, que lleva unos 30 años afincada en este municipio del área metropolitana de Granada de 5.500 habitantes, explicó el alcalde de Gójar, Francisco Javier Maldonado. Parece ser que la hija regresaba de Granada la pasada madrugada cuando halló muerto a su padre, que pudo ser apuñalado mientras dormía.
El Ayuntamiento ha puesto a disposición de la familia los servicios municipales, añadió el alcalde, que confesó que el municipio está «consternado». Juan de Dios Jiménez, un vecino colindante del matrimonio, aseguró que se trata de una familia «normal y tranquila» de la que nunca escucharon «una voz más alta que otra» en los veintiocho años que, dice, lleva el vecindario conviviendo con ellos y con la única hija de la pareja. «El hombre estaba enfermo pero lo sobrellevaba bien», contó este vecino.
