La situación que vive Utrera por el aumento de gorrillas está alcanzando niveles insostenibles. Cada vez es mayor el número de personas que ejercen dicha actividad en el centro, algo que va a obligar al Ayuntamiento utrerano a tomar medidas. El alcalde de Utrera, Francisco Jiménez (PA), anunció que está previsto llevar al pleno una nueva ordenanza municipal con la intención de que "haya cobertura legal para que la Policía Local pueda intervenir". Esto se debe a que, "con la legislación actual, si un ciudadano no denuncia previamente por amenazas, los policías no tienen la posibilidad de actuar por el simple hecho de que esas personas se encuentren en la calle pidiendo". Si la nueva norma no entra en vigor "en un plazo prudencial", Jiménez afirmó que publicará un bando "para dar cobertura legal e intentar acabar con esta situación".
A juicio del regidor, "no queda más remedio que tomar cartas en el asunto, aunque no es algo agradable", pero resulta "penoso que tengamos que padecer esos hechos". "Antes quizás no hayan hecho falta esas ordenanzas, pero ahora sí", ha recalcado.
La propuesta que llevará el gobierno al pleno está inspirada en la ordenanza que se aprobó en Sevilla capital. Así, indicó que "en Utrera el problema está más localizado que en Sevilla y esperamos que sea más efectiva y nos sirva de herramienta para acabar con este problema". El anuncio del alcalde coincide con una campaña de recogida de firmas que se viene desarrollando en las últimas semanas, instando a tomar medidas para erradicar el asunto. En varios comercios y bares del centro se han distribuido los pliegos de firmas que se harán llegar después al Ayuntamiento.
