Un joven de 24 años se encuentra en estado de coma desde el pasado jueves tras recibir una paliza cuando esa madrugada cuando se encontraba en una zona de marcha del municipio malagueño de Marbella. Hasta el momento, la Policía Nacional ha detenido a cuatro personas por su presunta implicación en la agresión, cuyas causas aún se investigan.
La víctima presenta traumatismo craneoencefálico y se encuentra muy grave, estando sujeta a ventilación mecánica, según informaron a Europa Press fuentes sanitarias del Hospital Carlos Haya de Málaga capital, en el que se encuentra ingresado.
Inicialmente, el joven fue trasladado al Hospital Costa del Sol de la localidad marbellí, aunque, ante su gravedad y las características de las lesiones que presentaba, todas ellas en la cabeza, los médicos estimaron oportuno que fuera evacuado al Carlos Haya para ingresar en la Unidad de Cuidados Intensivos. El joven presentaba rotura del tabique nasal, triple fractura craneal y dos hematomas en la frente
La agresión tuvo lugar en la madrugada del miércoles al jueves jueves en una zona de discotecas a la entrada de Puerto Banús, cuando el joven, que actualmente reside en Madrid aunque hasta hace dos años vivía en Marbella y se encontraba pasando las vacaciones en la localidad malagueña con su familia, se vio involucrado en una pelea con un grupo de chicos por motivos que aún están por determinar.
La Comisaría del Cuerpo Nacional de Policía de Marbella se hizo cargo de la investigación y tras recabar el testimonio de varios testigos que presenciaron la paliza, en las últimas horas ha procedido a la detención de cuatro jóvenes por su supuesta participación en los hechos. A algunos de los arrestados se les imputa como presuntos autores de un delito de homicidio en grado de tentativa.
Según publicó en su edición del domingo el diario Sur, el joven salió esa noche con unas chicas ya que algunos de sus amigos más frecuentes declinaron acompañarle y el detonante de la paliza pudo estar relacionado precisamente con una de las chicas. La pelea se produjo en los alrededores de la discoteca Dreamers, concretamente en la zona de aparcamientos.
