Dos profesoras de la escuela infantil Las Tres Torres de Sevilla Este, a la que Educación está intentando revocar la subvención por el "desajuste" entre el número de alumnos y la escasa comida que se servía, han ratificado que tenían que repartir un menú "entre tres o cuatro alumnos" y que la comida era "insuficiente" y "muy escasa".
El juez de Instrucción 7, Fernando Martínez, tomó ayer declaración en calidad de testigos a estas dos profesoras, una dedicada a repartir la comida del catering cuando llegaba al centro y la otra a darle de comer a los menores una vez que los alimentos habían sido divididos.
La primera ha ratificado los hechos incluidos en la denuncia que presentaron los padres de la guardería y ha llegado a echarse a llorar durante su declaración al recordar los hechos, por la "impotencia" y "desesperación" que sentía "al tener que dividir una hamburguesa en cuatro o cinco trozos", lo que provocaba que los niños "lloraran", según explicaron a Europa Press fuentes del caso.
Esta profesora relató cómo, al llegar a la guardería los menús, "tenían que abrir los segundos platos, que venían preparados de forma individual, para dividirlos entre varios alumnos", mientras que los primeros platos "no tenía que abrirlos ya que venían a granel". Según esta profesora, a los alumnos "se les daba de comer de forma muy escasa".
La otra profesora, que daba de comer a los alumnos y que fue quien informó de los hechos a la Delegación de Educación, ha ratificado "íntegramente" la denuncia de los padres de los niños y ha asegurado también que la comida era "insuficiente".
El juez tomará declaración mañana jueves a otros dos profesores, a la nutricionista del catering y a la representante legal y cocinera del catering. El viernes comparecerá la directora de la guardería "en calidad de denunciada". La Fiscalía decidió abrir diligencias por un presunto delito de malversación a esta escuela infantil, que también estaba siendo investigada por Educación.