Otro bombero murió ayer en Corbalán (Teruel) cuando acudía a sofocar un incendio forestal. Es la octava víctima mortal en lo que va de año, el tercero más dramático de la década, sólo superado por 2005, con 15 fallecidos, y 2003, con nueve. Mientras, ayer el calor y el viento mantenían activos una quincena de fuegos.
Los incendios forestales en lo que va de año ya han quemado más de 53.000 hectáreas (una superficie similar a Madrid con una extensión de 607 km2), unas 19.000 más que en el mismo periodo del año pasado. Un dato aterrador si se tiene en cuenta la cantidad de fuegos que siguen activos, la mayoría de ellos concentrados en siete regiones: Aragón, Comunidad Valenciana, Castilla-León, Castilla-La Mancha, Cataluña, Navarra y Andalucía. Para las tareas de extinción el Gobierno desplegó en el día de ayer 900 efectivos y decenas de medios aéreos.
Uno de los más trágicos, el de Horta de Sant Joan (Tarragona), seguía activo y sin control, aunque el departamento catalán de Interior ayer era "optimista" sobre su evolución porque el perímetro de las llamas no había aumentado. Este incendio, que llevaba ayer cuatro días en activo, ha quemado ya 1.140 hectáreas, de las que unas 400 corresponden al parque natural Dels Ports, y ha dejado cuatro bomberos muertos y otros dos, muy graves.
Ayer se celebraron en La Pobla de Segur (Lérida) y en Almatret (Lérida) los funerales de dos de los bomberos, mientras que un tercero fue incinerado en Reus (Tarragona). Está previsto que las exequias del cuarto fallecido se celebren hoy. También en Cataluña, tres bomberos resultaron heridos leves por contusiones y golpes de calor cuando trabajaban en las tareas de extinción de un incendio en Gavà, que ya está controlado.
En Soria, un cabo primero de la Unidad Militar de Emergencias que participaba en la extinción de un fuego en la Serranía de Cuenca también resultó herido leve al volcar la máquina que conducía. Este incendio en la serranía ha afectado a una superficie de aproximadamente 3.000 hectáreas, al igual que el del Condado de Treviño (Burgos).
Los seis incendios activos en Aragón ya han calcinado 10.000 hectáreas. En esta comunidad murió ayer el conductor de una motobomba que trabajaba en la extinción del incendio declarado en Corbalán (Teruel) al precipitarse el vehículo por un barranco desde un camino forestal.
Por otra parte, el incendio que se declaró ayer en el municipio castellonense de Onda obligó a desalojar 12 urbanizaciones situadas en el ámbito directo o indirecto del fuego, además se cortaron al tráfico al CV-16, entre Castellón y L'Alcora, y la CV-189, entre Castellón y Ribesalbes.
Por otra parte, seis personas han sido detenidas por su presunta relación con varios incendios forestales. Dos de ellos en Alicante, que ayer fueron puestos en libertad provisional con cargos. Son dos albañiles a los que les acusa de haber provocado un incendio al norte de la provincia. Además, dos personas han sido imputadas por la autoría de los incendios ocurridos en marzo y en junio en los municipios malagueños de Gaucín y Mijas, en los que la quema de restos agrícolas y forestales, sin guardar las medidas de seguridad oportunas, fueron la causa de ambos fuegos. También en Andalucía, la Policía Autonómica ha detenido a un vecino de El Cerro de Andévalo (Huelva), como presunto autor de al menos cinco incendios durante este año en la provincia, motivados por causas como la limpieza de caminos o la venganza por enemistad con los propietarios de las fincas Dañadas. Además, a última hora de ayer se arrestó a un hombre por su supuesta implicación en el incendio forestal de Onda.
Finalmente, el servicio del AVE Madrid-Barcelona interrumpido por el incendio de Medinaceli y Ricla quedó plenamente restablecido a las 11.50 horas. Por este corte, 13.241 viajeros se vieron afectados, para los que Renfe habilitó un plan alternativo de transporte.