Una veintena de centros de Sevilla obtuvieron pleno de aprobados en la parte genérica de la Prueba de Acceso a la Universidad (PAU), antigua Selectividad. De esa veintena de colegios, ocho son privados y concertados; el resto, públicos. El primer vistazo a los datos recogidos por las universidades de Sevilla y la Pablo de Olavide, a los que ha tenido acceso este periódico, señalan al Highlands School (colegio privado católico ubicado en Montequinto) como el colegio con la nota media más alta de la capital y la provincia de Sevilla, con un 8,281. Los alumnos del Highlands hicieron la Selectividad en la Universidad de Sevilla.
En la Hispalense, el segundo y tercer puesto en cuanto a notas medias lo ocupan el Buen Pastor (centro concertado y laico), con un 8,192 y las Escuelas Francesas (8,17). El cuarto puesto es para elSan Francisco de Paula, con una nota de 8,129. En el caso de los institutos públicos que se examinaron en la Universidad de Sevilla, destacan el IES Isbilya (frente a la estación de Santa Justa), con una nota media de 7,38, y el IES Torreblanca, con un 7,51, una calificación y unos resultados que deben ser puestos en valor teniendo en cuenta que se trata de un centro que atiende a jóvenes con un contexto económico y social poco favorable. En el caso de la Pablo de Olavide fue el Colegio Alberto Durero, más conocido como colegio alemán, el que se alzó con el primer puesto en cuanto a nota media (8,263, la segunda mejor de Sevilla después de la del Highlands School).
Le siguieron los centros San Fernando (7,595) y el IES Los Álamos (7,452). Pero la primera aproximación a los datos no es la que vale en estos casos, ya que los resultados de los colegios están íntimamente relacionados con el entorno social y económico en el que prestan servicios. Sobre esta realidad llama la atención la vicerrectora de Estudiantes de la Pablo de Olavide, Elodia Hernández, que, en declaraciones a este periódico, deja claro que de las notas medias y los resultados en general de todos y cada uno de los colegios en Selectividad «no se puede concluir que la enseñanza privada sea mejor que la pública». «Los números hay que leerlos con todas sus variables. Hay que tener en cuenta al número de alumnos que se lleva a Selectividad, el contexto al que pertenecen esos alumnos, los recursos de los que disponen, los estudios de sus padres...». Estos datos pueden servir de orientación a los padres pero «nunca», dice Hernández, como un ránking sobre la enseñanza en Sevilla.
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