La asamblea de Unicaja dio ayer su visto bueno al consejo de administración de la entidad malagueña para que constituya una nueva sociedad que tendrá como finalidad emitir deuda hasta un máximo de 1.000 millones de euros. Se trata de un mecanismo con el que obtener financiación de los mercados exteriores.
Unicaja emitirá instrumentos de deuda, tales como obligaciones, pagarés y otros valores análogos, por un saldo vivo máximo de hasta 1.000 millones de euros, que serán suscritos y avalados, "de forma solidaria e irrevocable", por la propia entidad.
La asamblea general ordinaria de la caja, celebrada ayer, aprobó autorizar al consejo de administración a constituir una sociedad que estará íntegramente participada por Unicaja y que tendrá por objeto emitir esos instrumentos de deuda, según informó ayer la entidad a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV). Se trata de una fórmula mediante la cual la entidad busca lanzar deuda con la que obtener financiación de los mercados exteriores y que fue propuesta por el consejo de administración para su debate en la asamblea.
Esta iniciativa se adopta, además, en un contexto marcado por la mayor flexibilidad del Banco Central Europeo (BCE), que el jueves pasado, junto al recorte del precio del dinero (tipos de interés) al 1%, también anunció que emitirá 60.000 millones de euros para comprar deuda vinculada al ladrillo (cédulas hipotecarias) a las entidades financieras. Una medida encaminada a recapitalizar a aquellas que han sufrido un fuerte deterioro de sus activos, sobre todo, los ligados a las viviendas.
OBRA SOCIAL. Pero no fue el único punto abordado por la asamblea, que también aprobó el presupuesto para 2009 de la Obra Social de la entidad, a la que destinará 69,5 millones de euros Así, esta actividad de la caja, que beneficia a más de cinco millones de personas a través de más de 4.150 actividades al año, ha incrementado su presupuesto en 1,3 millones de euros respecto al pasado ejercicio (68,2 millones), lo que supone un crecimiento del 2,37%. De esta manera, y pese al contexto actual de crisis, Unicaja no saca la tijera y mantiene el esfuerzo en este capítulo.
En la asamblea, se aprobaron también las cuentas de 2008 de la caja y de su grupo consolidado, el informe de gestión de la Obra Social, el de gestión del presidente, Braulio Medel, así como de su presupuesto para 2009, y se dio cuenta del informe de la comisión de control de la entidad. De las cuentas aprobadas, el beneficio resultante asciende a 260,19 millones de euros, de los que 210,19 se destinan a reservas generales y los 50 millones restantes al fondo de la Obra Social.
En el balance del ejercicio, la caja destacó la evolución del negocio, "pese al contexto de restricción de liquidez e incremento de la morosidad", y resaltó que, dentro de la política de prudencia seguida por todo el sector, Unicaja efectuó dotaciones para insolvencias por importe de 318,7 millones de euros, un 82% más que las desembolsadas en el ejercicio anterior.
El beneficio neto de Unicaja durante el primer trimestre ascendió a 105 millones, un 3,9% más que el año anterior. Como aspectos más positivos, desde la entidad destacaron el crecimiento del margen de intereses en un 8,1%, el aumento de los resultados por operaciones financieras (un 23,7%) y la contención en el incremento de los gastos de explotación (un 2,6%). Además, la morosidad se situó en el 2,8%, por debajo del 4,7% de media del sector.
